Con él muere una de las últimas caras del cine quinqui
Quique San Francisco era uno de los rostros más peculiares del cine español. El actor, que llevaba ingresado en el Hospital Clínico San Carlos de Madrid desde el pasado 23 de enero, ha fallecido a causa de una neumonía bilateral este lunes cuando contaba con 65 años de edad. La noticia ha sido difundida por ¡Hola! y confirmada posteriormente a Efe por fuentes familiares.
Su trayectoria comenzó en 1962, con sólo seis años. Trece más tarde llegaría su estallido artístico de la mano de Fernando Fernán Gómez. Desde entonces, su vida ha estado marcada por la interpretación y las drogas. Estuvo enganchado al caballo, a la cocaína, a la cerveza y, sobre todo, al arte. Pese a tener una amplia filmografía, nunca ocultó su preferencia por la función y el escenario: «Yo nací en el teatro, creo que es un género fundamental para un actor».
Deja a sus espaldas 70 películas, 40 obras de teatro y centenares de programas de televisión. Extravagante y polémico, Quique San Francisco vivió a su manera hasta el último de sus días. El legionario de voz ronca y ojos saltones que siempre quiso ser actor deja de luto a todo un género.