Tras 13 años, este próximo viernes 16 de diciembre se estrena la segunda parte de Avatar, Avatar 2: El Sentido del agua
La espera para Avatar 2 ha terminado. Todo comenzó el 18 de diciembre de 2009. James Cameron nos mostraba la belleza de los paisajes de Pandora, el conflicto interno de Jake Sully y el hermoso universo de los Avatar combinado con efectos especiales de ensueño y una banda sonora de la que el mismísimo Mozart estaría muy orgulloso.
13 años han tenido que pasar para ver Avatar: El Sentido del Agua o también conocida popularmente como Avatar 2, la consecución de una película que se llevó tres Oscar en 2010. ¿Ha merecido la pena esperar más de una década para disfrutar de esta segunda película de James Cameron en Pandora? En mi opinión, absolutamente. Me atrevería a decir que es mejor que la primera entrega y que va a ser la película del año 2022. Afirmaciones firmes que argumentaré a continuación acompañadas de alguna que otra mejora, desde mi punto de vista.
El sumun de los efectos especiales
Avatar 2 tiene más de 3.500 efectos especiales que permiten disfrutar del maravilloso mundo de Pandora casi siendo hasta un personaje dentro de la saga. Si por algo se ha caracterizado Avatar es por sus efectos especiales y en esta segunda edición encontramos planos mágicos que te trasladan a Pandora, el planeta que salvará a la gente del cielo; secuencias bélicas que te sitúan dentro de la película ayudado por la sensación 3D; y, sobre todo, la creación desde cero de una nueva tribu.

Un argumento más para jóvenes
Durante el preestreno de la película vi a algún que otro periodista salir descontento de la sala de visionado. De hecho, yo era el más joven de la sala. Y, tras leer alguna reseña, alguno concluía que su historia era aburrida y poco amena. Algo con lo que no estoy nada de acuerdo. Avatar 2, no es una película para reflexionar, para sacar conclusiones de la vida. Es una película simple y llanamente para disfrutar. Y quizá quienes la disfrutemos más, seamos los jóvenes por ser una película cargada de fantasía, de efectos especiales y con un argumento simple, pero magníficamente ejecutado.
El argumento de esta segunda película de Avatar, sin hacer mucho spoiler más allá de contar los primeros compases del film, te hace estar concentrado los 195 minutos pensando en lo que siguiente que les va a ocurrir a la familia de Jake Sully. Un aspecto que ha preocupado a muchos, pero que ha solventado a las mil maravillas como ya lo hizo con Titanic hace 25 años. Una película que presenta la misma duración que Avatar 2: El Sentido del Agua. Quisieron cortarla por motivos comerciales ya que consideraban que no tendría el mismo éxito que con esa duración. El tiempo ha dado la razón a uno de los maestros del cine como es James Cameron. Y en este nuevo capítulo de los Avatar también le darán la razón.
Respecto a los temas que podemos ver, se encuentra el enamoramiento juvenil, la venganza, el rechazo, la memoria combinada con los sentimientos para tomar ciertas acciones, pero sobre todo juega con lo referente a la familia. Juega con el rechazo familiar, la mayor debilidad y mayor fortaleza de la familia de los Sully: la familia siempre debe permanecer unida. Un aspecto que quizá me hubiera gustado ver más durante el transcurso del largometraje un mayor desarrollo individual de cada uno. Se me queda corto. Quería conocer más en profundidad a los personajes y, desde mi punto de vista, hubiera sacrificado parte de la acción bélica por el desarrollo y el crecimiento personal de estos.

Un nuevo universo del agua en el que quedaremos inmersos
En cuanto al desarrollo del guion, hay un cambio evidente decidido por varias premisas sencillas. La gente del cielo vuelve a Pandora para terminar con Jake Sully y poder realizar la migración terrestre a Pandora ya que el planeta de la gente del cielo se está muriendo. Aparte de eso, el guion tiene un giro de 180º. Para que tuviera el mismo éxito que la primera entrega, no se podía desarrollar en las mismas localizaciones. Hubiera perdido el interés de no haber sido así volviendo a la monotonía. Esto permite que hasta los espectadores nos tengamos que adaptar a la nueva vida mostrada en pantalla. Un universo del agua completamente nuevo y abierto a explorar con costumbres diferentes a la de los Na’vi.
Por tanto, considero que, si te gustan las películas fantásticas y te gustó la primera entrega, esta secuela te va a fascinar. La espera ha merecido la pena y de qué manera. Es una maravilla audiovisual que por suerte no tendremos que esperar hasta 2035 para ver la siguiente. Avatar 3 ya está en postproducción, la cuarta parte está en su última fase de rodaje y el genio de Cameron ya tiene en mente comenzar el rodaje de Avatar 5. Se prevé que los estrenos sean en 2024, 2026 y 2028, respectivamente. Para mí es, sin duda, la película del año para jóvenes alzándose con decenas de premios en 2023.