Francia se lleva el mini micrófono de cristal por segunda vez en estos tres últimos años y España logra el sexto puesto
La vigésima edición de Eurovisión Junior tuvo lugar el domingo 11 de diciembre a las 16:00 CET en el Karen Demirtchian de Ereván, Armenia. Tras ver las 16 actuaciones de esta edición, el país que se ha proclamado ganador de esta edición tan mágica ha sido Francia con la canción Oh Maman! interpretada por Lissandro. Mientras, Carlos Higes con su canción Señorita ha conseguido el puesto número seis para nuestro país.
La sensación ya es conocida: te sientas en el salón con tus familiares y amigos y el Te Deum empieza a sonar en tu pantalla marcando el inicio de uno de los eventos más esperados del año: el Festival de la Canción de Eurovisión. Aunque, esta sensación y este sentimiento no es exclusivo de la edición senior, sino que es algo que también sucede con la edición junior del festival más reconocido a nivel mundial. Esto es lo que pudimos vivir ayer cada uno desde nuestras casas cuando sintonizamos La 1 de RTVE para disfrutar de la vigésima edición del Festival de la Canción de Eurovisión Junior. Un formato que, aunque pequeño, nos llena de emoción al igual que el senior.
Un inicio lleno de magia
Tras esa sintonía que nos envuelve en el festival, nuestras pantallas se llenan de una introducción donde vemos el símbolo de esta vigésima edición: la peonza. Hasta que aparece una imagen ilustrada del Karen Demirtchian, recinto al que, tras una transición, el espectador es transportado para ser recibido por la anterior ganadora de Eurovisión Junior: Malena. Y aquí, es donde empieza a girar la magia, ya que, Malena, acompañada de los representantes de esta edición tan especial empieza a cantar Spin The Magic, la canción que da lema a la edición y que sirve para introducir el típico desfile de banderas al que este festival nos tiene acostumbrados para presentar a todos los participantes de esta edición, en la que han participado: Albania, Armenia, España, Francia, Georgia, Irlanda, Italia, Kazajistán, Macedonia del Norte, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, Serbia y Ucrania.
Los inconvenientes y las sorpresas de la tarde
Tras el desfile de banderas, las postales y las candidaturas de cada país han hecho que la vigésima edición sea verdaderamente especial. Aunque, los inconvenientes no faltaron en el día de ayer, ya que la representante de Serbia enfermó y a última hora no pudo hacer su actuación en el festival. Por suerte, hemos podido disfrutar de Katarina Savić gracias a los ensayos que esta hizo antes de enfermarse. Además, no ha sido la única actuación de la edición que se ha visto en peligro porque la representante de Reino Unido, Freya Skye, no pudo cantar en directo en el Jury Show del sábado. Aunque, por suerte, finalmente pudo hacer su actuación sin problema.
Por otro lado, las sorpresas no han pasado desapercibidas en el festival, ya que tras el famoso «Europe, start voting now» el país anfitrión nos ha sorprendido con las actuaciones de Malena y su nueva canción Can’t Feel Anything; la actuación acústica de la representante de Armenia en Eurovisión 2022, Rosa Linn; y, como plato principal, una actuación que ha hecho un gran recorrido por cada uno de los ganadores de la edición junior del festival, donde el Antes muerta que sencilla de María Isabel ha tenido su representación.
Francia se hace con el mini micrófono de cristal
Aunque, la mayor sorpresa de la tarde se la llevó Lissandro, el representante de Francia, quien con su canción Oh Maman! se ha llevado el mini micrófono de cristal a Francia con un total de 203 puntos. Mientras, el país anfitrión ha conseguido un segundo puesto gracias a Nare y su canción Dance!, la cual ha conseguido una puntuación total de 180 puntos. La medalla de bronce fue para Georgia que consiguió 161 puntos gracias a su representante Mariam Bigvava, quien ha interpretado la canción I Belive. Además, completando el top cinco, tenemos a Irlanda con la canción Solas (150 puntos) y a Reino Unido con la canción Lose my head (146 puntos).
Ser favorito del televoto no ha sido suficiente para España
En cambio, España no ha tenido el reconocimiento que todos esperábamos por parte del jurado profesional, aunque Carlos Higes haya sido el segundo del televoto, esto no ha sido suficiente para ganar el festival. Nuestro puesto final ha sido, con un total de 137 puntos, el sexto. Aún así, España puede estar orgullosa de la actuación de Carlos, ya que ha conseguido poner en pie a todo el Karen Demirtchian y a todas las personas que han disfrutado de su actuación desde el salón de sus casas.
En resumen, esta edición del festival ha estado llena de momentos mágicos. Armenia ha sido una gran anfitriona del festival y ha conseguido que todos los seguidores del certamen disfrutemos de como cada representante de cada país hacía girar la magia. Ahora, solo queda esperar un año para disfrutar de una nueva edición en nuestro país vecino, Francia, quien, seguramente nos devuelva la ilusión por disfrutar de la reunión más bonita de culturas que puede existir a nivel mundial: El Festival de la Canción de Eurovisión (ya sea en su edición senior o en su edición junior). Mientras, nosotros solo podemos esperar a la edición del año que viene para disfrutar de la magia tan especial que tiene Eurovisión Junior.
