Miles de manifestantes protestan “contra una lacra que asola los barrios obreros” y demandan medidas urgentes.
El pasado domingo 168 asociaciones, partidos políticos y agrupaciones convocaron una manifestación contra las casas de apuestas. La marcha, de Cuatro Caminos a Tetuán, transcurrió bajo diversos lemas como “Fuera casas de apuestas de nuestros barrios” o “Ellos se lucran. La clase obrera se arruina”.
Según algunos medios como El País esta manifestación convocó alrededor de 1500 personas, la más multitudinaria sobre este tema hasta la fecha. Otros medios como Público o El Heraldo no especifican un número exacto, sino que hablan de miles. Lo que sí está claro es que fue un aviso de estos colectivos a las casas de apuestas, que parece ser recibieron el mensaje. Todos los locales al paso de la manifestación estaban cerrados y con varios agentes de policía a sus puertas protegiéndolas de unos altercados que no tuvieron lugar.
Según la plataforma contra los locales de apuestas en Madrid, de los 378 negocios de este tipo que el Ayuntamiento de Madrid tenía contabilizados el pasado julio, más de la mitad se encuentran en Latina, Ciudad Lineal, Usera, Puente de Vallecas, Carabanchel y Tetuán. Que sean precisamente los barrios con las rentas más bajas de la capital, es algo muy criticado por los manifestantes, al no creer que sea coincidencia.
Hay una idea que comparten la mayoría de los manifestantes y activistas contra las casas de apuestas; son la adicción del siglo XXI. Muchos de ellos lo comparan con el problema de la heroína en los años 80, y critican que se encuentren tan cerca de los colegios. Uno de los cánticos de la manifestación fue: “Las patrullas nunca llegan cuando los menores juegan”, haciendo alusión al aumento de jugadores menores de edad.
Parece que esta es la primera de varias manifestaciones contra las casas de apuestas, una reacción al crecimiento exponencial de estas empresas, tanto en locales como en juego online, que ha llevado a su vez a un aumento casi proporcional de ludopatía entre los jóvenes de 14 a 21 años, según la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados.