Gestos tan sencillos como atarse los cordones de los zapatos, echarse el azúcar al café o lavarse los dientes, suponen muchas veces una odisea para personas que ven sus capacidades físicas o mentales impedidas. Hoy, 27 de octubre, se celebra el Día mundial de la terapia ocupacional. Aunque esta es una ciencia socio-sanitaria fundamental, muchos ni siquiera saben de su existencia.
La terapia ocupacional es una profesión perteneciente a la rama de ciencias de la salud que se encarga a facilitar la independencia a personas de todas las edades que padezcan algún grado de discapacidad física, psíquica o social, mediante fines terapéuticos. El objetivo principal es que el paciente haga su vida de la forma más independiente posible usando las herramientas y los métodos que los terapeutas les proporcionan.
En definitiva, la terapia ocupacional ayuda a personas de todas las edades con diferentes problemas físicos o psicológicos en su desarrollo de actividades sociales, en el cuidado de su salud y en el desempeño de actividades cotidianas como puede ser vestirse, escribir, coger el transporte público, etc.
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— 💔 20.10.20 💔 (@tiffonao) September 23, 2021
Terapeutas
Los terapeutas ocupacionales trabajan tanto en entidades físicas como psicosociales. Estas pueden ser: hospitales, clínicas, centros de día, centros de rehabilitación, escuelas especiales, programas de atención domiciliaria, empresas privadas e industria. También pueden trabajar como educadores y consultores.
El desempeño de su trabajo pasa por un primer proceso de evaluación del paciente, donde valora sus habilidades en el ejercicio de la vida diaria de la persona. El terapeuta realiza esta evaluación mediante la observación y las entrevistas con el paciente y con personas de su entorno.
Una vez realizada a evaluación, el terapeuta desarrollará un plan de actuación a corto y largo plazo. La intervención consiste en la enseñanza de métodos y el equipamiento de útiles que faciliten la vida del paciente.
Tipos
Hay diferentes tipos de especializaciones dentro de la terapia ocupacional en función de los tipos de pacientes que se traten, las técnicas y las áreas en las que se centre la atención.
Una de las intervenciones más demandadas es aquella que se encarga de la salud mental. Los terapeutas ofrecen ayuda a pacientes que sufren diversos trastornos como autismo, trastorno de la conducta alimentaria (TCA), trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), esquizofrenia, trastorno de ansiedad…
Los tratamientos desempeñados para el cuidado de la salud física también son muy populares. Los terapeutas focalizados en este campo se centran en la prevención de enfermedades y el tratamiento de aquellas que no tienen cura. Además, promueven hábitos saludables en el desempeño de las actividades diarias.
La terapia ocupacional puede especializarse en el ámbito de ayuda a personas de la tercera edad o a la intervención en las etapas de la infancia y la adolescencia. Estos se centran en remediar o prevenir la exclusión social, la soledad, los problemas familiares, las dificultades físicas por enfermedad o diferencias innatas…
Otra de las especializaciones más frecuentes e importantes es la que se encarga de las labores de rehabilitación. Los terapeutas ayudan a los pacientes que han sufrido diferentes tipos de lesiones físicas o psicológicas (como la pérdida de extremidades tras un accidente, un derrame cerebral o parálisis, etc.) a poder incorporarse de nuevo de la forma más autónoma posible en la sociedad.
Historia
La terapia ocupacional, aunque haya sido reconocida como ciencia de la salud, ha existido siempre. De hecho, se tiene constancia de que en la Antigua Grecia y en la Antigua Roma se usaban los masajes, la música, el ejercicio o los baños terapéuticos para aliviar el sufrimiento de personas que padecían trastornos mentales.
No obstante, durante el retroceso cultural que supuso la Edad Media, dejaron de usarse los métodos ligados a esta ciencia.
Con la llegada de la Ilustración en Europa y las nuevas ideas humanistas, volvieron a usarse técnicas como el ejercicio, el trabajo o el desempeño de actividades de ocio para aliviar los síntomas de las personas enfermas.
Sin embargo, no fue hasta principios del siglo XX cuando la terapia ocupacional se gestó como profesión. Fue del 15 al 17 de marzo de 1917 cuando, tras una reunión formal de 6 personas interesadas en el valor de la terapia ocupacional, se gestó esta disciplina.
Estas seis personas fueron: George Edward Barton (arquitecto), William Rush Dunton Junior (psiquiatra, escritor y editor), Eleanor Clarke Slagle (trabajadora social y considerada madre de la terapia ocupacional), Thomas Bessell Kinder (arquitecto y especialista en rehabilitación), Susan Cox Johnson (instructora de artes y oficios) e Isabel Gladwin Newton (en calidad de secretria).
Los líderes de la reunión fundaron la Sociedad Nacional para la Promoción de la Terapia Ocupacional (NSPOT), que en unos años pasaría a ser la Asociación Americana de Terapia Ocupacional (AOTA).
Nacimiento
El nacimiento de la disciplina se dio en una época de convulsión y cambios a nivel internacional. De hecho, la Primera Guerra Mundial fue fundamental para el reconocimiento de la actividad de los terapeutas ocupacionales. Durante los años de la guerra y al finalizar ésta, muchos soldados se vieron malparados, y tuvieron que aprender a llevar la vida sin extremidades o con problemas de salud físicos y psíquicos. Se podría decir, que el nacimiento de la Terapia Ocupacional actual tuvo lugar en el Departamento de Traumatología del ejercito Americano.
A partir de 1923, según la AOTA, se establecieron unos estándares mínimos de formación para la terapia ocupacional. En 1951, surge la Federación Mundial de Terapeutas Ocupacionales (WFOT). A partir de 1959, la WFOT comenzó a tener relaciones con la Organización Mundial de la Salud. En el año 1963, ésta fue reconocida como Organización No Gubernamental de las Naciones Unidas. Finalmente, en la década de los 80, se fundó una disciplina llamada ciencia ocupacional en la que se estudiaban las bases científicas y los efectos de esta práctica.
Actualmente, la terapia ocupacional es una disciplina con millones de profesionales y pacientes beneficiados en todo el mundo. Cada vez, esta práctica se extiende más y logra ayudar a un número más amplio de personas de todo tipo. Por eso hoy queremos recordar su importancia y hacemos honor a todos los terapeutas que dedican su vida a su vocación, que no es otra que ayudar.
