Versió en català més avall
Los idiomas no entienden de política ni de sentimientos, y nuestro único deber es garantizar su buen estado
En estos últimos...
Hace unos días, Salvador Illa, el actual ministro de sanidad, fue nombrado por sorpresa candidato a la presidencia de la Generalitat de Cataluña para...
Da la sensación de haberme ido a dormir hace tan solo unos minutos. Mi madre, veinte años más joven, me ha metido en la cama con un beso de buenas noches. Mi hermana está sentada a mi lado, en la guardería. Vamos a comer natillas y estoy ilusionado. Tanta emoción tengo que al abrir las natillas de vainilla se me caen al suelo. Bocabajo, cómo no. Las lágrimas salpican mis mejillas...
¡Kafka! Qué maravilla… esa mente profundamente misteriosa que ha embelesado a los más grandes estudiosos del último siglo… esa imaginación que creó una estética...
Los días festivos se han convertido en su totalidad, en días para regalar. Ya no se concibe una Navidad sin sus paquetes envueltos, o un 14 de febrero en pareja sin recibir un detalle. Parece que el espíritu consumista se ha apoderado del espíritu festivo prácticamente sustituyéndole. Sin ir más allá, las cartas de los Reyes Magos comienzan con un: “Queridos Reyes Magos, este año quiero…”. La historia se repite cada año y la lista cada vez es más larga. Los regalos cada vez se esperan más, hasta darse por sentados, convirtiendo las fiestas en algo puramente materialista promoviendo la “obligada” demostración de amor a través de consumismo.