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‘Nuevos Trapos’ de Dano: New York y la mutabilidad creativa

Dano se apropia del título Nuevos Trapos, uno de los temas más icónicos de Charly García, para construir su propia narrativa en torno al sonido neoyorquino y la constante reformulación creativa impuesta por los infortunios del destino.

La frase que nombraba su anterior trabajo de larga duración, El hombre hace planes, Dios se ríe, vuelve a funcionar aquí como un leitmotiv que atraviesa el proyecto artístico del madrileño, evidenciando la inevitabilidad de la adaptación y el cambio dentro de su obra.

Durante la listening party a la que El Generacional tuvo el privilegio de asistir, Dano explicó cómo esta referencia a Charly García nace de una profunda identificación con su figura y su proceso creativo.

García, pionero en la modernización del rock argentino, lanzó Clics Modernos en 1983, un álbum que transformó la escena musical latinoamericana al incorporar influencias sonoras provenientes de la vanguardia neoyorquina.

La portada de aquel disco, tomada en la icónica esquina de Walker Street con Cortlandt Alley en Nueva York (bautizada en 2023 como Charly García Corner en conmemoración del 40º aniversario del álbum), capturaba el instante de una transición artística y cultural. Detrás del músico, un grafiti con la inscripción «Modern Clix», llamó su atención, llevándolo a rebautizar su obra en el último momento. Para García, aquellos “clics modernos” representaban disparos de una cámara fotográfica, cuyas ráfagas inmortalizaban un momento de cambio a gran escala.

Dano en la Listenning Party de 'Nuevos Trapos' / Fuente: Pablo Algara
Dano en la Listenning Party de ‘Nuevos Trapos’ / Fuente: Pablo Algara (El Generacional)

Inspirado por esta premisa, Dano concibió inicialmente Nuevos Trapos como un EP de corta duración, grabado íntegramente en Nueva York y nutrido de colaboraciones locales. Sin embargo, la naturaleza mutable del proceso artístico lo llevó a expandir el proyecto hasta transformarlo en un álbum de mayor envergadura.

En este sentido, el paralelismo con Charly García no solo radica en la referencia nominal, sino en la noción de que el arte se encuentra sometido a fuerzas incontrolables que constantemente redibujan sus contornos. A través de este disco, Dano rinde homenaje a esa resignificación constante, construyendo una obra que, al igual que Clics Modernos, encapsula un instante de evolución y ruptura dentro de su propio universo creativo.

Entre latencias y hallazgos

A pesar de las constantes presiones de una industria que exige a los artistas vender su alma cada mes para mantener la atención del público y crear una dependencia constante, Dano es uno de los pocos que parece salir beneficiado por el tiempo de espera.

La diferencia temporal entre los periodos de creación de Istmo (2019) y El hombre hace planes, Dios se ríe (2023) distan considerablemente del de Nuevos Trapos (2025). Lo que deja entrever un posible ‘clic’ en su pensamiento y forma de considerar la industria y que, pese a gozar del favor de la espera, su método de trabajo y creación han podido experimentar modificaciones manifiestas.

Lo que sigue siendo innegable es que Dano continúa en plena forma lírica. Es probable que estemos ante su punto máximo, especialmente en lo que respecta a la búsqueda de melodías, estribillos y ese swing soulesco que siempre caracterizó su estilo.

Listenning Party de 'Nuevos Trapos' / Fuente: Pablo Algara
Listenning Party de ‘Nuevos Trapos’ / Fuente: Pablo Algara

Corte y confección

El álbum no solo brilla por su producción detallada y melódica de autoría completamente a cargo de Dano, exceptuando el segundo track, coproducido por Manu Beats, y el sexto, producido por Halpe, sino también por las colaboraciones que lo acompañan.

En Nuevos Trapos, Dano retoma la alianza con Ill Pekeño y Ergo Pro en Superdeportivo, junte que se nos comienza a hacer habitual tras pasados encuentros como El Manual o Picapollo.

Siguiendo la influencia neoyorquina que quería impregnar a su proyecto, hallamos una gran presencia angloparlante, en colaboraciones con BoriRock, CRIMEAPPLE, o Benny The Butcher en Nazaret (Purple Label), tercer integrante de GRISELDA en colaborar con MECEN ENT.

Siempre fiel a sus raíces, encontramos Argentina bien representada en Mark Ruffalo, cuarteto compuesto por Mir Nicolas, H de Perra y Cerounno. Además, sus raíces argentinas también se hacen presentes en Notorio, con la participación de Duki, y en Corazón, con Bhavi.

La representación femenina en Nuevos Trapos goza de la presencia de Lua de Santana, quien hace un año nos sorprendió con su EP GINGA; y La Blackie en Santería.

En este trabajo, Dano también da visibilidad a artistas que, aunque aún no gozan de una popularidad desbordante a nivel nacional, merecen ser reconocidos, como Johnny Doc, quien cuenta con trabajos destacados como Inmortales o Blue Magic junto a Rapp Gotti. Quizás tras esta colaboración, su presencia en la escena nacional se tenga en cuenta como es debido.

El traje del poder

Charly García grabó Clics Modernos en Nueva York, en medio del exilio forzado por la persecución de la dictadura militar argentina, un régimen caracterizado por la censura, la represión política y la violencia sistemática. En este contexto, la obra de García en 1983 se convierte en un grito de libertad, justo en el momento en que Argentina comienza a salir del yugo militar y dar paso a una nueva estructura democrática.

Sin embargo, si miramos el presente, nos encontramos con una figura como Javier Milei, quien, a pesar de la transición democrática y los avances sociales, se alinea con claras ideas fascistas y autoritarias. Su discurso populista, radical y antidemocrático refleja una vuelta a ciertas características autoritarias propias de otros períodos oscuros de la historia argentina.

En este sentido, Nuevos Trapos de Dano, al retomar el nombre de la canción de García, puede leerse como una referencia directa a los ecos de la opresión de aquellos años, pero trasladados a la actualidad.

Nuevos trapos, viejas costuras

Dano ha construido a lo largo de su carrera un imaginario artístico que se nutre de referencias estéticas muy concretas, especialmente vinculadas a la industria textil y la cultura Lo-Life, movimiento surgido en Nueva York a finales de los 80, en el que jóvenes de barrios marginales apropiaban el lujo de marcas como Polo Ralph Lauren y Tommy Hilfiger para reconfigurar su identidad dentro de la escena hip-hop, funcionando no solo como elementos visuales, sino como metáforas de resistencia, estatus y evolución.

Anoche, Dano cubría de Gore-Tex la capital, bajo una incesante lluvia que no supuso un obstáculo para la consecuente exposición de estas prendas que homenajean el movimiento estadounidense: polos, gorras, chubasqueros, puffers… Al fin y al cabo, Nuevos Trapos, pero viejas costuras.

 

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