Tras la polémica generada en el barrio de Sheij Yarrah, Hamás lanza más de 1.600 cohetes a Israel. A esto, se unen numerosas revueltas de árabes israelíes en Lod, Ramla y Haifa y una linchada contra árabes en Bat Yam.
Estamos ante el peor conflicto desde la guerra en 2014. Se registran 67 víctimas en Gaza, 8 en Israel y más de 400 heridos entre ambos lados. Durante esta semana, Hamás ha lanzado más de 1600 cohetes hacia ciudades israelíes de los cuales se calcula que un cuarto no han alcanzado su destino y han caído dentro del territorio palestino. A esto, se unen numerosas protestas violentas entre árabes israelíes y judíos en Lod, Ramla, Bat Yam y Haifa.
Desde hace más de tres semanas, Sderot y Ashkelón, ciudades al sur de Israel, reciben cohetes diarios dirigidos a población civil. La escalada en los ataques ha ocurrido tras los disturbios en Jerusalén el pasado fin de semana. El viernes, con la llegada del final del Ramadán, comenzaron revueltas de radicales palestinos en la Explanada de las Mezquitas.
Día de Jerusalén
El lunes 10 de mayo se celebró el Día de Jerusalén, fiesta que celebra la reunificación de la capital israelí tras la Guerra de los Seis Días. Centenares de israelíes fueron a la capital a celebrar dicha fiesta, pero las revueltas de los palestinos seguían y vieron esta festividad como una provocación. La policía tuvo que intervenir cuando palestinos comenzaron a tirar piedras sobre civiles.
Los extremistas palestinos se refugiaron en Al Aqsa, tercer lugar más sagrado en el Islam, y mientras que cientos de árabes estaban rezando, palestinos seguían tirando piedras desde ahí. La policía acabó entrando al complejo religioso lo que causó controversia y enfado en sectores árabes y sobre todo en Hamás. El incidente acabó con 200 heridos palestinos y 17 policías.
Ataque a Gaza
En represalia, desde la madrugada del miércoles 12 de mayo, el ejército israelí comenzó una serie de redadas y ataques selectivos contra el brazo militar de Hamás y la Yihad Islámica en Gaza que acabaron con 25 altos cargos de estos grupos terroristas, más de 40 civiles, una sede de inteligencia de Hamás, dos túneles de ataque y un edificio de almacenamiento de mercancías según informa la agencia palestina WAFA.
Como consecuencia inmediata a la muerte de sus efectivos, Hamás intensificó sus ataques, esta vez dirigidos a todo el territorio israelí incluyendo Tel Aviv y Jerusalén. Desde el comienzo de la semana, el número de cohetes lanzados desde Gaza se eleva a 1.600 de los cuales se calcula que cuatrocientos han caído en el territorio palestino causando víctimas en su propia población.
Cúpula de Hierro
La Cúpula de Hierro es el sistema de defensa del ejército israelí que ha interceptado en torno a un 90% de los cohetes lanzados. El sistema consiste en derribar los misiles en el aire, antes de que intercepten en la población civil. Para ello, el radar del «Iron Dome» detecta los cohetes rápidamente y transmite la información a un centro militar de operaciones que analizan los datos y activan el derribo de dicho misil. Esta tecnología fue implementada por primera vez en 2011 y ha desempeñado un papel fundamental en la defensa de civiles frente a ataques desde la franja de Gaza.
Linchamientos y disturbios dentro de Israel
Crece la tensión en ciudades con alta población árabe israelí. Las protestas comenzaron el martes en la ciudad de Lod y se han extendido a Akkó, Ramla y Haifa. La oleada de ataques a judíos con cuchillos e intentos de linchamiento, la quema de vehículos y sinagogas acabó con más de 400 detenidos y con la muerte a tiros de un árabe.
Como reacción a estos actos vandálicos, judíos israelíes ultraderechistas se tomaron la justicia por su mano en la ciudad de Bat Yam rompiendo ventanas y lanzando ladrillos contra negocios de propiedad árabe. Políticos de ambos lados condenaron todos los actos de violencia.
¿Qué es Sehij Yarrah y qué tiene que ver con todo esto?
Sheij Yarrah es un barrio de Jerusalén este que desde hace años lidia con una problemática complicada. Familias palestinas viven desde hace más de seis décadas en esta zona y están siendo desalojadas por la justicia israelí.
En 1956, el este de Jerusalén estaba bajo el control de Jordania. El barrio de Sheij Yarrah estaba deshabitado siendo un campo de olivos. Jordania llegó a un acuerdo con la UNRWA (Agencia de la ONU para los Refugiados de Palestina) para construir viviendas a 28 familias palestinas.
Tras la conquista de Jerusalén este en la Guerra de los Seis Días, las familias de este barrio pasaron a vivir en territorio israelí. El problema está en que el terreno donde están dichas viviendas fue comprado por emigrantes judíos durante el siglo XIX (cuando la región estaba controlada por el Imperio Otomano). Los derechos de propiedad siguieron en vigencia con el mandato inglés, pero, desde 1948 hasta 1967 durante el control jordano, perdieron vigencia debido a la privación de judíos del derecho de propiedad en Jordania (ley que sigue vigente actualmente).