60 metros separaban la desembocadura del pozo del pequeño de dos años
Julen, un niño de dos años, cayó el pasado domingo a lo más profundo de un pozo en la localidad malagueña de Totalán. Un amplio y experto despliegue de rescate se trasladó desde el mismo domingo al lugar.
Mucho se especuló sobre la manera de acceder al niño, dado que el riesgo de desprendimiento y otros movimientos de tierra son muy grandes. Finalmente se optó por la construcción de un túnel paralelo al pozo.
La Subdelegación del Gobierno ha explicado que los problemas en el acceso al niño son básicamente producidos por la dureza de las pizarra (material muy resistente que se encuentra a los alrededores del pozo).
53 metros se han excavado ya. Se prevé que en el día de mañana se llegue al pequeño, que se se tenía pensado comenzar la perforación horizontal esta madrugada, la cual consiste en que unos mineros de origen asturiano cavaran dentro de una jaula hasta llegar a donde se encuentra Julen.
Si los plazos se cumplen, el material no sorprende a los mineros, y no se produce ningún cambio climatológico, los equipos de rescates estarán junto al pequeño a lo largo de la jornada del martes.