El debate entre los siete portavoces ha sido mucho más completo y dinámico que el cara a cara entre Sánchez y Feijóo del pasado lunes
Este jueves 13 ha tenido lugar el debate a 7 entre los portavoces de los principales partidos parlamentarios en RTVE. Ha sido un debate completo, cargado de propuestas, de reproches, de reivindicaciones, de humor, de juegos de palabras, incluso de alguna mención al rey emérito. Y, para sorpresa de nadie, también de engaños.
Entrando con el pie derecho, o con el izquierdo
El debate comenzaba antes de la entrada de los portavoces en el plató. La llegada de los siete representantes permitía vislumbrar tímidamente cómo iba a desarrollarse el encuentro. Solo tres de ellos llegaban en taxi: Oskar Matute (EH-Bildu), vestido en vaqueros, zapatillas, y camisa informal; Rufián (ERC), acompañado de una sugerente carpeta amarilla; y Aina Vidal (Sumar), con una americana rosa.
Cuca Gamarra (PP) ha bajado del coche vestida en un traje blanco, pero con unos llamativos tacones de color azul eléctrico. Los otros tres, Aitor Esteban (PNV), Espinosa de los Monteros (VOX) y Patxi López (PSOE) iban en traje. El portavoz ultraderechista ha tenido una entrada triunfal, bajando de una furgoneta negra, de Mercedes, y saludando de manera casi reverencial a Elena Sánchez Caballero, presidenta del Consejo de Administración de RTVE.
Cada uno en su lugar
En el primer bloque se ha discutido sobre economía. Los partidos a la izquierda del PSOE coincidían en que a pesar de que los datos macroeconómicos sean buenos, las familias no lo notan en su día a día. Rufián destacaba que, aunque la economía española crece 4 veces más que la media europea, los salarios reales han bajado un 6%. Y Cuca Gamarra lo ha resumido en una frase: “Nos están vendiendo una moto, pero España no va como una moto”, en referencia a las declaraciones que ha hecho Sánchez en alguna ocasión sobre la trayectoria de la economía española.
Este inicio parecía una continuación del cara a cara del lunes, con un Patxi López hablando de la “técnica del Galope de Gish”, en referencia a las declaraciones incorrectas de Feijóo en el debate en Atresmedia; y una Gamarra que volvía a recordar que Sánchez congeló las pensiones en 2010, a pesar de que solo fueron las contributivas, y no afectó ni a las pensiones mínimas, ni a las no contributivas, ni a las de seguro obligatorio de vejez e invalidez.
Y la entrada del portavoz de VOX, Espinosa de los Monteros, ha estado marcada por un dato falso: que los españoles son los que más poder adquisitivo han perdido de la OCDE. Y es que nos superan países como Estonia, Turquía o Países Bajos, entre otros. Pero lo ha defendido hasta el final: “y lo que no son cuentas, son cuentos”.
Esta primera parte ha dejado entrever ese rifirrafe que ha sido una constante entre Rufián y Espinosa de los Monteros, con el primero llamándole clasista al dirigente de VOX al acusar a los demás representantes de no saber de economía. Por su parte, Aina Vidal, ha comenzado recordando que ya hay 28 mujeres que han sido asesinadas en lo que va de año, y ha dejado muy claro que las elecciones van de dos bloques, de avance o retroceso. Ha hablado de la cesta de la compra, pero sobre todo de medio ambiente, y sin duda ha sido la figura más calmada del debate.
Los partidos nacionalistas han barrido para casa. Aitor Esteban, recalcando la importancia del sector industrial en Euskadi, y Rufián ha afirmado que “en mi país, en Cataluña, 20.000 trenes al año llegan tarde”. Se ha hablado mucho de la importancia de la redistribución de la riqueza, y Gamarra ha criticado que las medidas del Gobierno como la gratuidad del cine para mayores de 65 años o la reducción del precio del transporte benefician a todos sin tener en cuenta la renta. Matute ha declarado: “Un país que invierte en su gente es decente, lo otro es Monopoly”.
Un partido de tenis
Espinosa de los Monteros ha dado el pistoletazo de salida de este segundo bloque sobre política social con una mentira, de nuevo. Que se han sustituido las matemáticas por la ideología de género. Y ha hablado del incremento en la criminalidad, sin contextualizar que ese aumento se debe en gran medida al auge de casos de cibercriminalidad, y que de hecho la “criminalidad tradicional” ha disminuido un 1,8% en estos cuatro años.
El portavoz de VOX afirmaba que la mejor política es la de crear empleo, y Rufián le respondía: “La mejor política social no es crear empleo. Es falso. La mejor política social es crear empleo de calidad”. Aunque inmediatamente después, Patxi López le ha reprochado al portavoz de ERC no haber apoyado la reforma laboral.
Cuca Gamarra ha vuelto a criticar al PSOE que no publique los datos sobre el número de fijos discontinuos, y según la portavoz del PP “lo ocultan porque realmente están maquillando las cifras”, dado que estos trabajadores, cuando no están ocupados, no se contabilizan como parados, pero tampoco como afiliados.
Se ha tratado también, como no podía ser de otra forma, el tema de la vivienda. Aina Vidal ha sacado a relucir la ley de vivienda, aunque recalca que ha sido tardía. Gamarra ha incidido en la propuesta del PP para “desalojar” a los okupas, y Matute se ha encargado de ponerle la guinda al pastel: “Momento patrocinado por desokupa”, bromeaba.
Rufián ha alegado sentirse orgulloso de la ley trans y de la “ley del consentimiento”, que asegura que es “terriblemente necesaria”, aunque “también imperfecta, como casi todas”. Buscaba un reproche hacia Sumar, por su veto a Irene Montero y al PSOE, por sacar adelante una reforma de esta medida. Patxi López aseguraba que Pedro Sánchez “pasará a la historia por habernos hecho un país mejor”, ante lo que Gamarra respondía que el presidente pasará a la historia, pero por las consecuencias de la ley de solo sí es sí.
El portavoz de VOX ha desplegado un listado de los excarcelados con esta ley, y ha asegurado que a todos “les molesta la realidad”, a lo que Rufián contestaba: “Me molesta el fascismo”. Y este último, junto a los portavoces de EH-Bildu y del PNV, han recalcado también la importancia de la derogación de la ley mordaza. El bloque ha finalizado con una reivindicación de la sanidad pública, con Aina Vidal pidiendo menos aplausos y más sueldo para los médicos.
Todos para uno, y uno para todos
Cuca Gamarra ha empezado el tercer bloque sobre política territorial, evadiendo la pregunta del moderador Xabier Fortes, acerca del balance de la situación actual en Cataluña, y se ha limitado a decir que “Lo que España es y será lo decidimos todos los españoles, no una parte de una parte de España.” Patxi López por su parte, ha reivindicado el papel de su partido en las negociaciones con Cataluña apoyándose en los buenos resultados que ha obtenido Salvador Illa en la región.
Pero el momento estrella ha sido el “regalo” de Rufián a Gamarra y a Espinosa de los Monteros: un ejemplar de la revista infantil en catalán Cavall Fort, que ha sido vetada en la biblioteca de Burriana (Castellón) por el gobierno de PP-VOX.
Aitor Esteban ha asegurado que “El Estado se enfrenta a dos patatas calientes: la patata catalana y la euskal patata”, reprochándole al gobierno la falta de atención a ambos sentimientos nacionalistas y proponiendo Europa como solución. Y el portavoz de VOX, partido que abiertamente rechaza la existencia de las autonomías abogando por el centralismo se ha referido a ellas como “reinos de taifas”; a lo que Rufián le recordaba que uno de los padres la Constitución fue Fraga: “No creo que usted esté en contra de aquello, ¿no?”.
Además, el portavoz de ERC ha preguntado explícitamente a Aina Vidal por el referéndum, y ella ha evitado una respuesta segura hablando de “Diálogo, pacto y acuerdo.” Después, se ha dirigido con la misma intención a Patxi López, pero el portavoz ha esquivado la pregunta.
Toca hacer equipo
La portavoz del PP ha abierto de nuevo este último bloque, cuyo eje central eran los pactos, y ha reiterado la idea de su partido de “superar la política de bloques y bloqueos”. Se ha referido al actual gobierno y a la posible futura coalición progresista como “Frankenstein”, alegando que se trata de una alianza inestable frente a la “moderación” que supondría un gobierno popular. El portavoz de ERC le ha respondido: “Yo prefiero a Frankenstein que a Drácula. Porque su coalición sería Drácula, chupasangre sobre todo a la clase trabajadora.”
Además, Rufián ha seguido con sus preguntas, y se ha dirigido a Patxi López para preguntarle si facilitarían un gobierno del PP en caso de que los populares ganasen las elecciones. La respuesta del socialista ha sido rotunda: “No.”. La portavoz de Sumar ha optado por pedir la unión de las izquierdas y por animar a la ciudadanía a que salga a votar. “Juntas podemos, Patxi”, se ha dirigido Vidal al portavoz del PSOE.
Por su parte Espinosa de los Monteros ha preferido recordar que se cumplen 26 años del asesinato de Miguel Ángel Blanco, y se ha referido directamente a Matute para atacarle planteando la posibilidad de que el portavoz de EH-Bildu hubiera participado en algún acto delictivo de ETA. Matute le ha respondido: “Yo me encontraba en una vigilia en Ermua, la noche previa a que asesinaran a Miguel Ángel Blanco.”
Este último bloque se ha basado en una disyuntiva entre un PP defendiendo su gobierno en soledad y un PSOE reivindicando que las medidas tomadas en esta legislatura no han derivado de la presión de los socios. Sumar animando a la unión progresista, encontronazos entre un EH-Bildu centrado en la defensa de derechos y un PNV que reivindica no ser la “muleta” de nadie, pero que no termina de cerrar la puerta al PP. Un ERC que critica el pacto en Barcelona y un VOX que se define a sí mismo como diana perfecta para el voto útil.
Ha terminado siendo un debate dinámico y completo, en el que se han abordado distintos temas y puntos de vista. Y lo que queda claro es que el próximo 23 de julio se disputa una disyuntiva entre dos grupos bien diferenciados.
