Tras un año esperando, Love, Victor llega para resolver el cliffhanger de su primera parte
El spin off de la famosa película Love, Simon arrasó en la plataforma el verano pasado. Ahora, coincidiendo con el mes del orgullo, ha estrenado su esperada segunda temporada. La anterior entrega dejó a la audiencia conteniendo la respiración después de que Victor saliera del armario con sus padres. Ahora, es el momento de que le veamos afrontar esta decisión en el primer capítulo.
El trailer de la serie ya dejaba claro qué podíamos encontrarnos en esta temporada: una mayor cercanía entre Victor y Benji, el regreso de Mia después de su ruptura, una progresiva paz entre Armando e Isabel después de su separación… diversas tramas que empezaron a encajar desde el arranque de la segunda temporada. Ahora solo nos queda esperar a que, poco a poco, se vayan publicando el resto de capítulos. Mientras tanto, hay muchas otras series que deseamos ver este 2021.
Primer capítulo: ¿a la altura del hype creado?
Sin duda, el final de la primera temporada dejó a su público deseando más contenido. Para quienes no lo recuerden, Benji y Victor finalmente se besaron y comenzaron una relación, rompiendo el corazón a Mia. Además, Victor después de reunir el valor, salió del armario con sus padres. No pudimos ver su reacción, la temporada llegó a su fin con un primer plano de Victor esperando una respuesta.
La temporada comienza en el mismo punto en el que nos dejó el año pasado. Y enseguida busca responder el hype creado: no alarga el capítulo de forma innecesaria. Nada más comenzar, podemos ver la reacción de la familia de Victor a su salida del armario. Y aunque Pilar, su hermana, muestra de forma incondicional su apoyo, la reacción de sus padres es más que decepcionante. Lo que, viendo la temporada pasada, tampoco es una sorpresa.
Un nuevo tablero de juego
Este comienzo hace que la segunda temporada se plantee diametralmente opuesta a la primera. Victor ya no tiene que descubrir quién es, pero ahora debe lidiar con sus padres, su ex y cómo de pública quiere que sea su nueva relación. Los padres de Victor se posicionan como uno de los mayores obstáculos de la temporada. Aunque Armando esté haciendo un esfuerzo por aceptar a Victor, la actitud de Isabel deja mucho que desear.
Otro de los puntos más interesantes es Mia, la amiga y ex de Victor. Tras irse todo el verano, e ignorar a todos en el camino, debe regresar a un mundo en el que siente que no encaja. Su padre espera un nuevo hijo, su exnovio ha empezado a salir con Benji, su mejor amiga Lake está en una relación feliz con Felix y su antiguo amor Andrew ha rehecho su vida. ¿Qué papel le queda reservado cuando todo el mundo parece estar avanzando tanto? Solo queda esperar que el resto de la temporada nos lo aclare.
¿Qué queda por ver?
Con este planteamiento inicial, solo podemos desear que se traten ciertos aspectos en los siguientes nueve capítulos. La familia de Victor es muy religiosa, y podría resultar especialmente interesante ver cómo concilian sus creencias (tan arraigadas) con la sexualidad de su hijo. Una línea en la que Disney no suele adentrarse, pero que resultaría necesaria y podría fomentar muchas conversaciones.
Otra narrativa muy necesaria sería la familia de Felix. En el primer capítulo resulta claro que la enfermedad de su madre ha empeorado. Hasta el punto de que han comenzado a tener problemas económicos. Podría ser una oportunidad muy interesante para que se muestre al público que es necesario pedir ayuda en esos casos, y que Felix no tiene las herramientas necesarias para encargarse de su hogar. Apenas es un adolescente.
Y por supuesto: Victor y Benji. Ahora que por fin están juntos, les quedan muchos retos que afrontar. Cómo será recibida su relación en la escuela, cómo lidiaran con la presión de los padres de Victor, si serán capaces de hacer frente a las dificultades con las que se tope su relación… Por suerte, por lo que adelantaba el primer trailer, queda claro que hay Victor y Benji para rato.
Un potente arranque
El primer capítulo de Love, Victor, es justamente lo que prometía. Los personajes siguen siendo igual de graciosos que siempre, la naturalidad de la serie se mantiene y la química entre todos los actores es innegable. Incluso cuando se adentra en momentos de la narración más densos y duros, como el rechazo de los padres de Victor, la serie consigue mantener su tono alegre.
Es un primer buen paso, pero quedan otros nueve episodios en los que deberá convencer al público de si el acierto de la primera temporada fue una simple casualidad o están ante algo especial y que merece la pena. De momento, la única conclusión que podemos sacar es: bienvenidos de nuevo al Creekwood. Nunca antes habíamos tenido tantas ganas de que comenzasen de nuevo las clases.
