Vuelve iCarly después de casi 10 años
La primera temporada del revival de iCarly llegó a su fin el pasado 26 de agosto. Durante 13 episodios logró retomar a gran parte de la audiencia original de la serie, mostrándonos caras y situaciones conocidas, pero con un tono mucho más adulto.
En diciembre del 2020, ocho años después del final de la serie original, se anunció que CBS había encargado una nueva temporada de iCarly para su servicio de streaming, producida por Nickelodeon Studios. Traerían de vuelta a Miranda Cosgrove, Nathan Kress y Jerry Trainor para interpretar a Carly, Freddy y Spencer, pero una década más viejos y con todos los problemas que trae la vida adulta. El 17 de junio se estrenaron los tres primeros episodios en Paramount+ en Estados Unidos y Canadá. En Latinoamérica se estrenaría el 30 de julio. Paramount+ todavía no ha sido presentado en España, pero se espera que llegue a inicios del próximo año.
Podemos notar en el cast la ausencia de Jennette McCurdy, la actriz que interpretó en la serie original a Sam Puckett, mejor amiga de Carly y coprotagonista en su show. McCurdy confirmó en su podcast Empty Inside que decidió dejar la actuación en el 2013, después del fallecimiento de su madre, además que se sentía avergonzada y arrepentida de los roles en los que había participado en el pasado como joven actriz. Otra ausencia es la de Noah Munck, que en la serie original interpretó a Gibby, uno de los amigos de Carly, declaró en 2017 que tenía una relación extraña con su personaje, y que no creía que participaría en un eventual reboot hasta mejorarla. Presuntamente a ambos se les fueron ofrecidos sus papeles originales, pero sus ausencias hablan por sí solas.
Ya no es una serie para niños
El revival, a diferencia de la serie original, deja la mayoría del tiempo de lado el webshow de Carly y se centra completamente en los personajes y sus problemas de la vida adulta. Tenemos a una Carly que después de terminar la universidad en Italia regresa perdida a su vieja ciudad, a un Freddy con dos divorcios encima y una hija adoptiva, y a un Spencer que ahora es millonario, pero que sigue siendo torpe y muy desmañado. Para suplir la falta del personaje de Sam, nos introducen a Harper, la nueva mejor amiga de Carly, una estilista fallida con un trabajo de sueldo mínimo en una cafetería. Ella, junto con Millicent, la hija de Freddy, se vuelven personajes recurrentes y con sus propios arcos.
La serie asienta velozmente el tono a uno adulto y mucho más maduro de lo que era en su presentación original, además de ser más inclusiva. En los primeros 10 minutos del primer capítulo mencionan tener relaciones sexuales, hay consumo de alcohol y se dicen varias groserías. Todo esto se vuelve un factor común en la serie, como es normal que sea en cualquier serie dirigida hacia adultos, pero aun así no evitó que fuesen estas las situaciones que más llamaron la atención en las redes sociales. En YouTube, muchos de los clips de estas escenas más maduras pasan el medio millón de visitas, como por ejemplo cuando Spencer contrata sin saberlo a una trabajadora sexual para Freddy, cuando Brooke le propone un trío a Carly y Freddy o una de las veces que Carly maldice.
Sabiendo todo esto es obvio que nos encontramos con un revival que es muy distinto al material original. La serie sabe que su público es exactamente el mismo que tuvo hace 10 años, y se aprovecha de eso para demostrar que sus personajes crecieron junto a nosotros. iCarly ya no trata sobre niños jugando con la tecnología, ahora estamos con adultos jóvenes acercándose a los 30 años que se balancean entre vivir su vida y descubrir el significado de esta. La serie encuentra un nuevo ángulo y profundidad, pero sin dejar que su viejo estilo de comedia por sketches se pierda en su evolución, dándole un nuevo camino a las mismas ocurrencias que nos hicieron reír de jóvenes.
Tendremos segunda temporada
El 15 de julio se confirmó que la serie sería renovada para una segunda temporada, y se espera que llegue a Paramount+ en verano del año que viene, aunque todavía no hay nada confirmado. De todas formas, podemos tener esperanzas de un regreso temprano. Teniendo en cuenta que la producción de la primera temporada solo tomó tres meses, y sabiendo que el equipo ya había empezado a trabajar en el guion de la nueva temporada antes del season finale, es probable que tengamos más iCarly antes de lo esperado.