El arranque de su nueva saga no dejará a nadie indiferente
Ariana Godoy lanza su nueva trilogía, una fantasía oscura que sorprenderá a sus lectores más acérrimos. La escritora venezolana es conocida alrededor de todo el mundo por el innegable éxito de A través de mi ventana (2019) y su adaptación en Netflix, pero no parece dispuesta a frenar pronto. Ahora ha decidido embarcarse en una aproximación totalmente distinta con su última obra, La Revelación, el primer libro de su esperada trilogía Almas Perdidas.
Deja atrás la imagen que proyectó con su bestseller para adentrarse en un mundo gobernado por vampiros y todo tipo de criaturas. Una vuelta de tuerca a uno de los géneros más populares del momento con el que la autora prometía sorprender, y así lo ha hecho. A lo largo de las aproximadamente 350 páginas que conforman la novela el lector no sabe qué está sucediendo o cuándo ocurrirá el siguiente giro. Una intriga que mantiene a lo largo de toda la obra…
¿Por qué vampiros?
La premisa de la obra tal vez pueda provocar dudas en algunos lectores. Una vez más se trata de una trilogía sobre vampiros en un contexto en el que tras cientos de obras de gran éxito sobre la misma temática parece que no queda más que explorar. Crepúsculo, Crónicas Vampíricas, Vampire Academy no es necesario pensar mucho para encontrar multitud de ejemplos protagonizados por este tipo de criaturas. Pero esta no es razón para descartar el libro: Ariana Godoy presenta su propia interpretación.
Al leer La Revelación, es evidente la diferencia con cualquiera de estas otras obras. Godoy supera el típico cliché de un vampiro centenario que conoce a una joven e indefensa humana, que obviamente caerá rendida en los brazos de la criatura y se terminará convirtiendo. No, Godoy no sigue esta línea. Nos presenta un mundo donde todos los protagonistas, de una forma u otra, ya son vampiros: Morgan, la protagonista femenina, es una vampiresa convertida hace casi un siglo.
Por su parte, Shadow, la figura masculina más importante, es un poderoso Purasangre, término que Godoy emplea para hacer referencia a aquellos vampiros que ya nacieron siéndolo. De este modo, nos muestra los choques culturales entre dos facciones que, aunque pertenecen a una misma especie, tienen unas dinámicas sociales muy marcadas: los Purasangre se alimentan de los vampiros convertidos, y los vampiros convertidos de los humanos. ¿Podrá surgir el amor entre dos grupos tan iguales pero distintos?
Un mundo sorprendente
Aún así, donde Godoy destaca es en su capacidad de no quedarse en la superficie. Podría haber sido mucho más sencillo presentar la historia de un amor imposible en un contexto gris sin demasiado detalle. Pero Godoy no escogió la vía fácil. Más allá de los vampiros, hay un mundo mucho más complejo con sus propios problemas y divisiones. Un territorio dividido en dos grandes espacios separados por un muro de magia y poder cuyos secretos promete revelar a lo largo de la trilogía.
Por un lado encontramos el Territorio Sobrenatural, un entorno habitado por todo tipo de criaturas. No solo vampiros sino cruentus (una especie de creación propia y gran violencia), licántropos y sobre todo la promesa de que queda mucho por ver a lo largo de la saga. Por otra parte y al otro lado de la barrera mágica, encontramos el Territorio Humano, donde como es fácil de adivinar, viven las personas corrientes. Sin embargo, queda claro a lo largo de la narración que aunque carezcan de poderes, no están en absoluto indefensos…
De este modo, Godoy demuestra una preocupación por su saga. No es una historia cualquiera sino que posee sus propios mitos y leyendas. Elementos que emplea para captar la atención del lector y jugar con sus expectativas. Nunca sabes lo que deparará el siguiente capítulo porque crees conocer el mundo y las piezas que hay en juego, pero realmente solo conoces aquello que Godoy te ha dejado ver, guardando siempre espacio para las sorpresas.
El peso de los personajes
Del mismo modo que La Revelación destaca en la creación del universo narrativo y en su firme intención de alejarse de los estereotipos del género, no acierta en la creación de los personajes. Shadow, el interés romántico de la protagonista, junto con Aidan, el líder del clan de Morgan, son los personajes que realmente mueven la trama. Tienen profundidad, poder, historia y motivos ocultos. No se puede decir lo mismo de la protagonista.
A pesar de lo mucho que prometía el carácter de Morgan, su desarrollo se queda muy corto. Probablemente se debe a la intención de potenciar su evolución en las siguientes entregas, pero deja que desear como protagonista. Durante todo el libro, Morgan carece totalmente de agencia. No toma una decisión por sí misma, siempre condicionada para bien o para mal por personajes masculinos que realmente mueven la trama. Ella se limita a reaccionar a las circunstancias sin realmente tomar la iniciativa en ningún momento.
Esto sería menos preocupante sino fuese la tendencia general con los personajes femeninos. Mientras que los masculinos adquieren una posición de poder y llevan la trama, confabulando, traicionando y planteando estrategias, los personajes femeninos se quedan en segundo plano. Son la enfermera del clan, la madre que fracasa en proteger a sus hijos, la enemiga celosa… planteamientos estereotípicos sin fuerza ni personalidad que impiden equilibrar realmente la novela.
Un comienzo prometedor
La Revelación no es perfecta. Entretenida, divertida, sorprendente incluso, pero no logra alcanzar todo lo que prometía. Sin embargo, esto no la vuelve menos disfrutable. Es un arranque positivo de una trilogía que, con sus dos próximas entregas, tiene la oportunidad de profundizar en sus aciertos y compensar sus carencias. Una lectura que sin lugar a dudas no dejará indiferente a quien tenga la oportunidad de disfrutarla.
Además, aquellos que necesiten saber cómo continúa la historia no tendrán que esperar mucho. El próximo junio Ariana Godoy lanzará El Nuevo Mundo, la prometedora continuación de la trilogía Almas Perdidas. Ariana Godoy ha apostado fuerte con esta nueva novela y su tiro no ha sido ni de lejos errado. Los amantes de sus historias disfrutarán con esta nueva entrega, y quien sabe… quizá les parezca una auténtica revelación.