Al principio, concebía la plataforma de interactividad de contenidos Twitch como un lugar donde diferentes youtubers o figuras de relevancia social jugaban videojuegos. No obstante, en los últimos años estamos observando como esto ha dado un giro de tuerca, y es que cada vez más, se utiliza para realizar entrevistas, concursos de entretenimiento, eventos especiales o incluso para entablar conversaciones sobre temas de relevancia. Tanto es así que incluso han llegado a la plataforma periodistas con el fin de realizar sus funciones adversas, además claro está de los creadores de contenidos que ya se encontraban en ella, que han cambiado su forma de actuar.
Es obvio que en los últimos años la relevancia de los medios convencionales ha perdido gran importancia a la hora de medir las audiencias en los informativos o realities, hasta el punto de que la población joven no vea casi la televisión formal. Esto les ha llevado a informarse sobre diversas noticias de relevancia en Twitch, donde encuentran una forma de conocer los contenidos de una manera más cómoda y amena. Este es el principal motivo por el que muchos creadores de la plataforma han cambiado la forma de dar sus contenidos. Incluso algunos periodistas de oficio se han introducido de manera adversa en Twitch para hacer llegar diversas noticias a una audiencia por la que a través de los medios convencionales ya no llegan.
Multitud de creadores de contenido o también denominados “streamers”, han adecuado sus contenidos a facetas periodísticas sin desempeñar el oficio, como puede ser el caso del streamer vasco Ibai Llanos, quién ha realizado diferentes entrevistas con un tono más humorístico y espontáneo. Precisamente, esto es lo que llama la atención de los más jóvenes ya que, visualizan contenidos que le interesan y que tienen relevancia pero en otro contexto más libre y coloquial. En este sentido, son varios los streamers que, gracias a su amistad con deportistas principalmente, han retransmitido charlas o partidas de videojuegos con ellos, lo que permite mostrar una cara más humana que quizá no mostrarían en una entrevista convencional. Sonados fueron los titulares que el futbolista Gerard Piqué dejó en su entrevista con el streamer DjMario
Estos streamers no pueden ser considerados periodistas, pero si es cierto que han adquirido grandes facetas del oficio, llegando a realizar una acción periodística sin desempeñar la profesión.

El público prefiere esta forma ya que permite establecer una relación de cercanía con el que aporta esos contenidos, en este caso el streamer. Permite interactuar mediante el chat y así poder ir de un tema a otro, por tanto nunca vas a saber de que se va a hablar o que te van a transmitir, a no ser que sea algo ya prefijado, como un evento a gran dimensión, por ejemplo la velada de boxeo del streaemer vasco Ibai Llanos, que, de nuevo, es el mejor ejemplo para evidenciar este nuevo fenómeno. Hay un diferencial con los dispositivos más tradicionales. En las radios, la televisión y los diarios la comunicación es unidireccional. En cambio en Twitch hay un intercambio permanente y un sentido de pertenencia que genera comunidad y participación.
Se observa en los códigos y jergas que ya están consolidados. Cada streamer tiene los suyos y se manifiestan en las alertas, en las donaciones o los momentos de votación. Los streamers ven en esto una oportunidad para llegar a más audiencia, lo que le sigue de una mayor reputación y fama. Por dar más ejemplos, Gerard Romero es un periodista catalán que ha logrado saltar a la fama gracias a Twitch, que cuando vio esta oportunidad de regeneracionismo de la comunicación, la cogió al vuelo.
Por otro lado, creo que hay que destacar la introducción de periodistas de oficio en la plataforma, como bien he mencionado anteriormente, con el objetivo de realizar una democratización de los contenidos. Además, claro está, de volver a recuperar una audiencia que estaba perdida. Al fin y al cabo, uno va al sol que mas le calienta y hay casos de periodistas como Juanma Castaño (periodista deportivo) o Siro López, que han pasado a Twitch para difundir contenidos deportivos pero de diferente manera, es decir de la manera más interactiva y libre posible, que es lo que atrae a este nuevo público. Un caso que requiere de especial relevancia y que he mencionado anteriormente es el de Gerard Romero, este periodista apenas era conocido por el periodismo español en general, sí es cierto que siempre recababa buenas informaciones deportivas, pero no llegaba a darse a conocer socialmente. Por tanto, decidió realizar una combinación de sus facetas periodísticas y el entretenimiento humorístico de la plataforma Twitch, algo que lo ha impulsado al estrellato como una catapulta. Esto deja indicar que no siempre tienes que regirte por unas normas específicas, sino de amoldarte a los nuevos medios y ver lo que más puede llamar la atención de la audiencia.
Por irnos al otro lado del charco, la política estadounidense es un tema denso y complejo que a priori parece alejado de los intereses de los jóvenes, pero un streaming en directo de esta plataforma consigue democratizar y hacerlo accesible a todos los públicos.
Así, mientras Emilio Doménech (periodista) explica a su audiencia cómo funciona el sistema electoral estadounidense, puede hacer un inciso para contestar a un espectador que le pregunta cómo le gusta la tortilla de patata o hacer un alto para bailar la canción Latinos por Donald Trump porque se lo pide otro seguidor.
El público siente que tiene la capacidad de interactuar continuamente con lo que se le cuenta, por lo que es más fácil captar y mantener su atención. Y no solo los medios de comunicación se suman a esta ola: Más Madrid se convirtió recientemente en el primer partido político español en abrirse una cuenta y la famosa política estadounidense Alexandra Ocasio-Cortez aprovecha para hablar de política mientras retransmite partidas en directo.
Twitch no solo democratiza el contenido, también el periodismo. Gracias a sus facilidades, cualquier persona puede retransmitir en directo una charla o entrevista con una figura relevante, convirtiéndose en un evento de masas.
No puedo exponer que la información dejará de difundirse por la televisión tradicional porque es imposible, lo que es obvio es que la forma de difundir noticias, información y entretenimiento por este tipo de plataformas no va a cesar.
Referencio esto con una guerra en la que las balas son las noticias y el campo de batalla es la tecnología, donde unos y otros luchan por conseguir el mayor número de audiencia. Hay enemigos, que pueden ser los periodistas que se alían con este tipo de plataformas y enemigos que trabajan en los medios convencionales, donde van a tratar de quitar valor a la transmisión de contenidos de esta forma.
Lo que es obvio es que el periodismo está cambiando, así como que otras personas pueden realizar facetas mínimas de un periodista con un poco de fama, relevancia social y sobre todo humor. De todos modos, ya queda a juicio crítico de cada uno lo que creer y lo que no, lo que ver y lo que no, pero poco a poco nos estamos adentrando en una especie de nueva sociedad de la información.