La rama artística que deriva de las bellas artes posee un gran impacto en la comunicación con la sociedad
No debemos olvidar que por muy novedoso que suene el diseño gráfico, esta rama surge siglos atrás. Parece que con el descubrimiento de la Inteligencia Artificial se ha potenciado más el uso de la creación de nuevas imágenes, pero ¿cómo surgió el diseño gráfico?
A pulir piedra
El inicio se remonta al Paleolítico con las pinturas rupestres. Era la manera de comunicarse a través del arte. Al igual que pasaba en el antiguo Egipto con los jeroglíficos, o en la antigua Roma y China con los manuscritos. No obstante, cuando se desarrolló la impresión de libros en el siglo XV, el diseño gráfico no tardaría en hacer su aparición. En la Revolución Industrial se empezaron a desarrollar los primeros carteles, que no tenía otro fin que informar a la población sobre la situación actual y motivar a la reflexión crítica, fomentando así la participación de la ciudadanía en la toma de decisiones para el beneficio social.
La “época dorada”
¿Sería el caso de la guerra civil española? ¿O la Gran Depresión? Sí, son algunos ejemplos entre otros. A finales del siglo XIX y a principios del siglo XX, el cartel tuvo su propio “boom”. Nacían las primeras escuelas de diseños y la más reconocida fue la Escuela Bauhaus, en Alemania. Las primeras pautas para desarrollar la publicidad se marcaron por Herbert Bayer, diseñador gráfico, quién analizaría cómo el mensaje publicitario llega a la ciudadanía. De esta iniciativa, surgen los primeros carteles propagandísticos, ya sea para publicitar marcas o para hacer un llamamiento a la ciudadanía a la participación de guerras o elecciones electorales. Cada detalle, tonalidad, colores, figuras… todo estaba medido para que la ciudadanía se viese implicada en el bienestar de la sociedad. Un beneficio y a su vez un arma para motivar a las masas a actuar.
“La publicidad es el factor moral y fuerza en nuestra vida pública”, según el periodista estadounidense Joseph Pulitzer. El desarrollo de la publicidad y a su vez, del diseño gráfico, ha permitido que la sociedad cree o piense que necesita “nuevos objetivos”, además de que la sociedad esté informada constantemente. Un especialista en la psicología publicitaria como Miguel Andrés Rosa Martínez afirma: “La publicidad tiene el poder de influir en nuestras decisiones de compra, nuestras opiniones y hasta en cómo nos vemos a nosotros mismos.” Es importante estar informados, pero a su vez tenemos que diferenciar la realidad de las idealizaciones que realiza la publicidad. “Debemos ser conscientes de cómo la publicidad puede afectar nuestras decisiones y nuestra autoestima”, asegura el especialista.
El nuevo diseño gráfico
A finales del siglo XX, con la aparición de las nuevas tecnologías como la televisión, la producción de carteles descendió notablemente. La sociedad actual se caracteriza por la inmediatez de recibir la información, por lo que el diseño gráfico continúa en “la época dorada” pero desde un punto de vista más tecnológico. Cada vez hay más escuelas de diseño que fomentan los estudios de esta rama artística, la publicidad se encuentra en todas partes: televisión, redes sociales, vallas publicitarias… Asimismo, se emplean nuevas técnicas para la creación de nuevos diseños tanto de la estructura de las páginas webs o redes sociales como de generar nuevas imágenes. Sí, en este último caso damos la bienvenida a la Inteligencia Artificial.
En estos últimos años, se han desarrollado diferentes aplicaciones web capaces de generar sus propias imágenes en cuestión de segundos. Esta herramienta permite que el usuario explore su creatividad y le ayude a detallar o encontrar un enfoque diferente al que había pensado para su diseño. Por ello, sí se hace uso de la IA debemos ser conscientes de que tenemos que estar contantemente informados para utilizarla correctamente ya que es cuestión de tiempo que el uso de esta herramienta vaya mejorando.