La impresionante racha del ruso sigue su curso
Daniil Medvedev ha vencido este domingo a Jannik Sinner, haciéndose con el trofeo de campeón del Miami Open. El ruso, seguramente el tenista más en forma del momento, se ha impuesto a un Sinner que venía con la vitola de favorito tras su gran victoria ante Carlos Alcaraz.
Daniil Medvedev continúa con su impresionante racha este 2023. El ruso, que suma 24 victorias en sus últimos 25 encuentros, ha llegado a la final de todos los torneos en los que ha participado este año a excepción del Australian Open. Daniil está completando una temporada prácticamente inmaculada por el momento, y hoy ha vuelto a dar muestras de su estado de forma al vencer a otro de los hombres más destacados del momento: Jannik Sinner. El italiano, que venía de protagonizar uno de los encuentros de este 2023 como lo fue el partido de semis ante Alcaraz (6-7, 6-4, 6-2), no ha podido hincarle el diente a un rival que se le sigue atragantando (6-0 para Medvedev en sus enfrentamientos).
Jannik, uno de los jóvenes llamados a establecerse como gran campeón en los próximos años, tendrá que seguir esperando para conseguir su primer Masters 1000. Daniil Medvedev, por su parte, suma un nuevo trofeo a su mochila, con la curiosidad de haber conseguido todos en torneos diferentes. El ruso no quiere poner fin a la mejor racha tenística de la actualidad, a pesar del inicio en las próximas semanas de la gira de tierra batida. «Si pudiera elegir, sólo se jugaría en pistas duras (…)» bromeaba Daniil al finalizar el partido.
Medvedev dominó a partir de la consistencia
Jannik Sinner llegaba a la final como favorito a ojos de la gran mayoría tras vencer en semifinales a Carlos Alcaraz. El español, verdugo hace una semana de Medvedev, no pudo esta vez superar al italiano. Sin embargo, «Carlitos» y Sinner protagonizaron un espectáculo tenístico en lo que fue uno de los partidos del año, sino el mejor hasta la fecha. Así, todas las miradas se posaban en el lado del italiano, quien estaba ante la posibilidad de conquistar su primer Masters 1000. Sin embargo, un head to head completamente favorable para Medvedev, además del estado de forma del ruso, han marcado la diferencia. Daniil, tal y como viene haciendo, y de manera más visible aún ante Jannik, tejió su habitual tela de araña para alzarse con un nuevo título. Medvedev volvió a ser el tenista más fiable, a pesar del arranque de partido del italiano.
Sinner, quien después declaró haberse sentido algo enfermo desde esta mañana previa al partido, comenzó el partido de la mejor manera. Con 2-2 en el marcador, Jannik conseguía romper el servicio de Medvedev, con su habitual juego ofensivo que hasta el momento se mostraba intacto. Las complicaciones para el italiano llegaron en el juego posterior: Medvedev se aferró a su consistente juego desde el fondo de la pista y los errores no forzados cayeron del lado de Sinner. Daniil continuó con la misma línea, añadiendo golpes ganadores a su solidez habitual, mientras que Sinner acumulaba más fallos. Desde el resto precisamente cerró el ruso el primer parcial, mientras que el equilibrio era el mejor aliado de Medvedev (13 errores no forzados y 14 winners), mientras que Jannik sumaba 26 errores no forzados y tan sólo seis ganadores.
A partir de aquí, todo parecía favorable por el juego mostrado para Daniil, quien además comenzaría el segundo parcial rompiendo el saque de su rival. Sinner, quien le consiguió devolver la rotura, se hundió a partir de volver a perder el saque. Con bastante más comodidad que en la primera manga, el ruso consiguió ponerse en situación de proclamarse campeón de un nuevo y diferente título, cosa que finalmente consiguió. Jannik, quien reconoció haber cambiado aspectos de su juego para adaptarse a Alcaraz, no fue esta vez capaz de encontrar soluciones ante el tenista más en forma del panorama tenístico actual. Daniil Medvedev suma un nuevo título en una ciudad diferente y continúa con una racha sólo al alcance de los más grandes y consistentes campeones.
