Los peores resultados en la historia del PSOE andaluz y las continuas derrotas en comicios autonómicos presagian un cambio de ciclo en el Gobierno de la Nación. Es imposible ocultar el profundo desgaste del Ejecutivo. La terrible gestión de Sánchez y sus malas compañías condenan a los candidatos socialistas. La victoria absoluta del PP andaluz hace saltar todas las alarmas en la Moncloa. Es más que evidente y lógico el cambio de rumbo que se está dando en la política española.
A pesar de 37 años de gobierno ininterrumpido, Andalucía, bastión socialista, se ha transformado en feudo del PP tras estas elecciones. Todos los análisis llevan a la misma conclusión: se ha premiado la gestión del presidente de la Junta, Juanma Moreno, con una mayoría absoluta y se ha castigado con dureza al PSOE y a Sánchez. Algo similar ocurrió en los comicios de la Comunidad de Madrid, con Isabel Díaz Ayuso como clara vencedora. El gobierno intenta transmitir una postura tranquila y dar menor importancia a lo ocurrido, pero la realidad es que los nervios en Ferraz están a flor de piel. La estrategia del miedo a la extrema derecha, la corrupción del PP y los llamamientos a movilizaciones de izquierda ya no funciona y el Partido Popular no da cuartel con la estrategia centrista de Feijóo.

El dominio del bipartidismo lastra a los demás partidos
Vox, tercera fuerza política en España, viene de conseguir unos resultados que dejan con mal sabor de boca a los de Abascal, debido a las altas expectativas. El “efecto Olona” no ha cuajado en Andalucía y frena a Vox. El partido aspiraba a entrar en la Junta de Andalucía y solamente han obtenido un par de escaños más. A pesar del desliz en el sur de España, Vox sigue creciendo, ya que en todas las elecciones mejoran sus resultados, algo que no puede decir ni Ciudadanos ni la extrema izquierda.
Por su parte Ciudadanos está en un momento muy delicado tras sufrir otro batacazo electoral y estar en vía de extinción. Los liberales desaparecen del Parlamento Andaluz tras haber participado en el último gobierno de la Junta. Han pasado de cuatro a cero gobiernos, de cerrar gobiernos de coalición con el PP en Andalucía, Madrid, Murcia y Castilla y León, a ser arrollados por Génova en cada comicio. Esto se debe en gran parte a que los populares han captado todo el voto de centro. Inés Arrimadas afirmó que va a darse un cónclave para refundar el partido, no solo con cambio de nombre, si no también el programa. Begoña Villacís, vicealcaldesa de Madrid gana enteros para ser la nueva líder. Podemos se estanca obteniendo resultados muy discretos en las urnas.