El FC Barcelona se impone al Getafe por 3-0 en la jornada 5 de la liga española
Los de Flick suman tres puntos para seguir en la parte alta de la clasificación en un partido muy serio en líneas generales. El Getafe, por su parte, no tuvo éxito con el plan defensivo que planteó Bordalás.
Un Dani Olmo que volvió loca a la defensa azulona y un Ferrán devorador fueron los protagonistas del partido. El valenciano firmó un doblete y el canterano un gol y una asistencia mágica.
El plan: Abrir la lata pronto
El Getafe es un equipo que se siente muy cómodo si llega con un marcador corto a lo últimos compases del encuentro. Su planteamiento de equipo duro, compacto y agresivo al balón parado le viene como anillo al dedo a este plan de partido. Una vez la arena del reloj se va consumiendo, los rivales empiezan a perder la calma y a precipitarse, y ahí los de Bordalás se mueven como pez en el agua.
Es por ello que para los rivales, especialmente los equipos dominantes y propositivos como el caso del Barça, es primordial desatascar el partido antes de que llegue esa zona roja. En el caso de hoy, los culés lo lograron y pusieron patas arriba el plan del equipo azulón. Fue a través de una jugada coral: Raphinha, cerca de la línea de banda, aprovechó el desmarque de Koundé llevándose la marca para filtrar un balón a Dani Olmo, que tras un taconazo sensacional asistió a Ferrán, que la cruzó a la escuadra con el interior de su pie derecho.
En el minuto 34, con un desmarque desde su propio campo, Raphinha aprovechó el espacio de la zaga getafense para dejar mano a mano a un Ferrán que definió al palo corto con calma y precisión, engañando a un David Soria que no pudo evitar el engaño del delantero. Los blaugranas llegaban con una renta de 2-0 al descanso.

Un Barça suelto ante un Getafe entregado
En la reanudación del encuentro, el Barcelona explotó su fútbol liberado de presión y con un contexto muy favorable. Bordalás hizo un triple cambio introduciendo a Kamara, Javi Mñoz y Davinchi para cambiar el rumbo. Flick también movió el banquillo. Rashford le dio descanso a Raphinha y salió con ganas de generar caos tras su doblete en Champions.
Flick gestionó minutos y esfuerzos, e introdujo a Fermín y Casadó por Ferrán y Frenkie De Jong. El equipo catalán continuó pisando el acelerador, y con una galopada hasta línea de fondo, Rashford la puso atrás y asistió a un Dani Olmo que redondeó con gol su gran actuación a los 62 minutos.
A partir de ahí, el Barça durmió el partido y se encargó de que el Getafe no reaccionase con fútbol, sin embargo los madrileños se mostraban desesperados y ansiosos por abandonar el Estadi Johan Cruyff. Prueba de ello eran las entradas y roces que buscaban.

Final con susto y preocupación
El partido fue muriendo sin demasiado ajetreo, pero dejó un sabor de boca amargo con un Fermín que acabó dolido en la última acción. El andaluz está formando una rivalidad muy competitiva con un Dani Olmo en la media punta. Una situación que al Barcelona le viene de maravilla, ya que tiene dos perfiles distintos para cada tipo de partido y se retroalimentan el uno al otro.
El Barça se mete en el bolsillo los tres puntos, recuperando sensaciones después del parón, mientras que el Getafe ve frenado su buen inicio de temporada.
Ambos equipos ya con la mente puesta en la jornada 6, además intersemanal. El Barcelona viajará a Oviedo y el Getafe recibe la visita del Deportivo Alavés en un partido de alta intensidad.

