Desde el inicio de la pandemia, la agenda real muestra una tendencia que reduce la presencia del monarca en el exterior
Tras la abdicación del rey Juan Carlos I en 2014, un nuevo reinado marcaba una nueva etapa en la historia de España. El heredero a la Corona desde enero de 1977 se convertía en el nuevo Soberano del reino español, asumiendo una nueva agenda.
Un nuevo reinado
El acceso al trono de Felipe VI y doña Letizia trajo consigo las tradicionales presentaciones a Europa: un total de nueve visitas oficiales, destacando Ciudad del Vaticano, siendo esta la primera visita oficial que realizaron los nuevos reyes de España. Tras la visita al Papa Francisco, Felipe VI continuó su ronda de presentaciones y Europa se preparó para una “gira real”. La República de Portugal, el Reino de los Países Bajos o el Gran Ducado de Luxemburgo. Don Felipe y Doña Letizia visitaron oficialmente estos países.
Finalizadas las primeras presentaciones, un año más tarde, los Reyes se trasladaban a EE.UU, México y la República de Francia. Tres viajes de Estado con sus respectivos protocolos ceremoniales a los que habría que sumar el Viaje Oficial a las Instituciones Europeas. Además, la presencia del Rey fue notoria en seis países más: Arabia Saudí, Etiopía, Reino de Dinamarca, República Federal de Alemania y Líbano. Esto denominado como reuniones o viajes exprés. Encuentros que aún en la actualidad siguen siendo los más frecuentes en la agenda real y que establecen una conexión diplomática entre España y el resto de países.

Manteniendo la misma tendencia, entre 2016 y 2019 se realizaron un total de 41 visitas al exterior, desglosadas en visitas de Estado o de carácter oficial bajo la diplomacia del rey español. Entre estas, destaca la visita de Estado realizada al Reino Unido que tuvo lugar en julio de 2017. Otro acto de gran relevancia fue la entronización del Emperador Naruhito de Japón, al que acudió Felipe VI acompañado por la reina Letizia.

La llegada de la pandemia: un antes y después
En 2020, el mundo se paralizó por completo con la llegada del Coronavirus. Una situación que afectó a la vida cotidiana de todos los ciudadanos, incluida la monarquía española. Previo al establecimiento del Estado de Alarma en España, el rey Felipe VI mantuvo su agenda con normalidad siguiendo la hoja de ruta establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS). La agenda internacional previo al confinamiento estuvo marcada por su visita a Jerusalén (Israel), finalizando con su papel externo el 11 de marzo, durante su asistencia a París (Francia) al acto de homenaje con motivo de la Jornada Europea de Víctimas del Terrorismo. A partir de ese entonces, la Zarzuela se enmarcó en una situación socio-sanitaria marcada por la digitalización. Los despachos de los reyes de España se preparaban con el fin de realizar videoconferencias para mantener los lazos nacionales e internacionales.

Cinco años más tarde, la normalidad no ha vuelto a la Zarzuela. A pesar de la eliminación de restricciones, los Viajes de Estado u Oficiales se han reducido considerablemente en base a la agenda internacional del monarca que fue retomada en 2021. El año posterior a la pandemia, los reyes de España realizaron un Viaje de Estado al Principado de Andorra y otro al Reino de Suecia. Asimismo, bajo denominación de reunión, Felipe VI llegó a trasladarse a cuatro países. Incluyendo la República de Ecuador, Perú, la República de Francia y Colombia. Un total de seis visitas que demostraban una voluntad por parte de la Casa Real de retomar la agenda diplomática en un contexto post-pandemia.
Las visitas bajo mínimos
En 2022, cumplidos dos años desde el inicio de la pandemia, los Viajes de Estado u Oficiales se mantenían bajo mínimos. La República Federal de Alemania y la República de Croacia fueron los países visitados durante este periodo. De la misma forma, cabe destacar que la agenda internacional de Felipe VI aumentó considerablemente en este año con visitas de denominación de reunión, especialmente en países de América Latina. Esto expone un aumento en la actividad que pretende una relación más cercana con regiones clave como América Latina y Europa. Eso si, viajes sin la categoría de Visita de Estado.
Europa sin restricciones, una etapa post-pandemia
El año 2023, una vez eliminadas las restricciones a nivel global, podría haber sido motivo de excusa para favorecer la internacionalización del rey Felipe VI, pero esto no fue así. Dos viajes de Estado y 10 visitas a países diferentes. Una agenda internacional menor al 20% con respecto al 2022. Tras este leve descenso, el 2024 se ha convertido en el año en el que Felipe VI ha realizado más viajes en representación de España. La Agenda Real tenía prevista la realización de tres Viajes de Estado: Reino de los Países Bajos, Reino Hachemita de Jordania y la República de Italia.

A pesar de los esfuerzos de la Casa Real española y la Moncloa, el conflicto entre Israel y Palestina provocó que la visita de Estado a Jordania redujese su categoría a Viaje Oficial por seguridad del propio monarca. Esto obligó a tomar medias estrictas como la cancelación de la asistencia de la reina Letizia al reino de Abdalá II. En adición, el rey realizó 14 visitas, incluyendo las tomas de posesión de los presidentes latinoamericanos y las reuniones que pretenden fomentar las relaciones entre España y el resto de países. Una situación que podría considerarse favorable para la Corona española, eso sí no tuviéramos en cuenta que parte de estos viajes se engloban en los Países Bálticos (Estonia, Lituania y Letonia). Esto es signo de una concentración de actos en la agenda real.
Pedro Sánchez eclipsa al rey Felipe VI en el exterior
Por su parte, la agenda internacional del presidente del Gobierno en 2024 ha sido un 112 % mayor con respecto a la del rey Felipe VI en el mismo año. Un incremento de actividad externa de poco más del 70 % con respecto a 2019. Según los datos recogidos en la agenda oficial de la Moncloa, Pedro Sánchez, entre la legislatura XIII y la XIV (2019), realizó un total de 21 viajes al exterior frente a los 36 que ha realizado en 2024.

Esto indica un cambio de tendencia por parte de la Casa Real y la Moncloa por establecer viajes en la agenda del Rey, pero que no reciben denominación de Estado u Oficial. Unos datos que reflejan el descenso de la presencia del monarca a nivel internacional. La pandemia ha sido un punto de inflexión en la relación de la Casa Real y la Moncloa, pero también lo ha sido para Europa y América Latina. La geopolítica en estos últimos cinco años ha cambiado considerablemente. Esto debe tenerse en cuenta, ante el establecimiento de conflictos armados en puntos estratégicos que han provocado reuniones constantes entre los líderes europeos. Reuniones a las que el rey de España, al igual que el resto de monarcas de Europa, no ha participado.

Un conflicto diplomático
Una situación que no solo se enlaza a Europa. Sheinbaum, nueva presidenta de México, rechazó la presencia del rey Felipe en su Toma de Posesión. La nueva mandataria exigía el perdón del monarca español por los hechos sucedidos hace 500 años, desatando un conflicto diplomático.
El Rey se debe a la Constitución Española, la cual establece en el artículo 56 que, aunque sea el “Jefe del Estado, símbolo de su unidad y permanencia”, no tiene poder de decisión en asuntos de política exterior. De la misma forma, tal y como indica el artículo 64 de la máxima norma de España. “Los actos del Rey serán refrendados por el Presidente del Gobierno y, en su caso, por los Ministros competentes”. Algo que recientemente ha visibilizado una falta de comunicación entre la Moncloa y la Zarzuela. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, promulgó una polémica. Este se quejó públicamente de no haber sido informado de la invitación extendida por el Gobierno francés a la Casa Real para asistir a la reapertura de la Catedral de Notre Dame.
El nuevo inicio de la Catedral supuso una histórica Cumbre a la que asistieron todos los Jefes de Estado del mundo. Ni Felipe VI ni doña Letizia asistieron al acto por decisión propia y no bajo prohibición del Gobierno español, confirmó el Palacio de la Zarzuela. Algo que provocó que no hubiese representación española en el histórico encuentro.
La monarquía en España
La agenda internacional de Pedro Sánchez aumenta mientras la del rey de España disminuye. El rey ha sido apartado de una política exterior que en sus primeros años de reinado era más propia de la Casa Real que de la Moncloa. Cambios que podrían achacarse a las necesidades de Europa, y que en parte, eclipsan al soberano español. Un ejemplo de ello es el viaje del presidente del Gobierno a la India. Sánchez fue recibido con honores de Jefe de Estado, casi de la misma manera que lo fue Juan Carlos I en 2012.

De la misma forma que disminuyen los actos del Rey en el exterior, también sucede en el interior. La última visita de Estado que se recibió en España fue en 2023. El Palacio Real recibió por última vez al presidente de la República de Colombia en compañía de la primera dama. Una diferencia notoria que destacan en comparación a otras monarquías de Europa, como Suecia que solo en 2024 recibió al presidente de Francia, al primer ministro finlandés y a los reyes de Dinamarca.

Hasta la actualidad Pedro Sánchez ha realizado aproximadamente 250 actos internacionales. Felipe VI, según datos ofrecidos por la Zarzuela, no supera las 170 visitas al exterior en diez años de reinado. Datos objetivos que exponen una diferencia del 60 % a favor de Sánchez.

