4.9 C
Madrid
miércoles, 19 noviembre, 2025
4.9 C
Madrid
miércoles, 19 noviembre, 2025

Denom: «He llegado a escribir canciones en cartones de leche»

Denom repasa su evolución en la escena del rap español, desde sus inicios hasta su conexión con Japón en su álbum Kintsugi, hablando sin filtros sobre industria, autenticidad y futuro

Desde sus primeras barras con nueve años hasta el all in que lo llevó a dejar el tatuaje por la música, Denom repasa en esta entrevista para El Generacional su evolución artística, su conexión con Japón y cómo encontró en el rap una forma de sanar heridas que no sabía cómo verbalizar. Nos habla sin filtros sobre la crudeza, la libertad creativa y el valor de rodearse de quienes creen en ti.

Pregunta: ¿Recuerdas el primer verso que escribiste y por qué lo hiciste?

Respuesta: Bueno, primero de todo, muchas gracias por invitarme, por la entrevista y por el ratito que vais a dedicar en esto. Y, contestando a tu pregunta, me acuerdo perfectamente, era así: “Somos diferentes, somos iguales, somos como hermanos, no hay quien nos separe.” Tenía nueve años cuando hice esta barra y fue por la integración social.

P: ¿Qué te hizo pasar de escribir para ti a querer compartirlo con el mundo?

R: Pues mira, cambió un poco en el momento que Natos y Waor empezaron a ponerse las pilas. Ellos me metieron mucha presión con que: “hermano, tú haces música igual que nosotros desde niño, tú esto lo vives de verdad”. Me insistieron mucho en que intentara, por lo menos, dedicarme a ello.

Yo grababa música, pero nunca lo subía a ningún lado. Y entonces, con ellos, fue un antes y un después. Luego también marcó mucho el momento en que conocí a Fernandocosta y me invitó a ir con él a los conciertos.

Me hice una de las giras suyas con él entera, tanto metiéndole coros como cantando algunas de mis canciones. De hecho, esas mismas todavía ni estaban en YouTube ni en ningún lado.

Él también gastó mucho tiempo en decirme: “tío, eres una de las personas que he conocido que de verdad hace rap y lo vive como si fuera su vida”. Entonces, como que ahí cambió mucho el chip y empezamos a hacer los primeros vídeos, conocí a Grimey y vi cómo funcionaba un poco la industria musical desde dentro.

De repente me di cuenta de que la música llegaba a la gente y que había personas que se sentían identificadas. Dije, pues, vamos a intentar darle un poco más de voz.

Denom durante una entrevista para El Generacional | Fuente: Rodrigo Nombela Domínguez (@r.nombela21)

P: ¿Y cuál fue el momento concreto en el que decides apostarlo todo por la música?

R: Pues mira, yo vivía del tatuaje. Además, me iba bastante bien. O sea, era muy underground porque yo no publicaba nada de mis tatuajes a ninguna red social ni nada de eso. Entonces, recuerdo que yo había conseguido ahorrar un poquillo de dinero. En ese momento hice un all in, literal.

Tenía dinero como para pagar la casa y un poquillo más. Por ello, decidí que ese mes iba a pagar un poco más tarde la casa, para pagarme un par de vídeos. De pronto funcionaron y ahí fue el momento.

P: ¿Siempre quisiste dedicarte a la música?

R: Yo hacía música, pero en esa época no era tan común saber que los artistas ganaban dinero o incluso cobraban por un concierto. Yo pensaba que tú ibas ahí a cantar porque amabas la música.

Entonces, siempre vivo la música como algo que es de mí para mí, incluso hoy en día también, aunque ya le dediquemos más tiempo a cosas como esta, de hacer entrevistas o de hacer unos vídeos un poco más elaborados.

De hecho, siento tanto la música que, aun pensando en no recibir nada, lo haría igual con el mismo arte y dedicándole la misma pasión.

P: Entrando ya con Kintsugi, que es tu álbum más reciente. Primero, ¿por qué Japón?

R: Fue el propio disco el que nos llevó hasta Japón. Yo llevaba un tiempo mostrando un poco en algunas canciones como Morir de la Pena o en Como Siempre, por ejemplo, cosas del mundo asiático, porque a mí me llama mucho la atención.
Sin embargo, Kintsugi empezamos a crearlo en las instrumentales, también le pedí a los productores que metieran algunas narraciones de películas de anime.

De hecho, la gente no se ha parado a darse cuenta de eso, porque hay cosas de la Princesa Mononoke. Entonces como que vimos que el factor común de la movida era Japón. También había una parte mía personal, porque una persona que formó parte de mi vida fue la que me introdujo un poco más en todo el mundo del anime, incluso en la comida japonesa. Por eso me apetecía que formara parte de este disco.

P: ¿Viviste alguna experiencia, estas veces que has ido a Japón, que hayan cambiado tu forma de ver el arte o la vida mismamente?

R: Pues sí que me ha enseñado cosas y sí que he aprendido. Principalmente, es muy importante rodearte de gente que crea en tu proyecto tanto como tú.
Para mí era algo completamente nuevo. Yo, al final, soy muy autodidacta y siempre que he querido formar parte de cada una de las cosas.
Pero cuando das con un equipo que cada uno tiene su misión en esa parte del trabajo y lo cogen como algo suyo…

Por ejemplo, el director de imagen exclusivamente para ver cómo iba a ser la movida, el director de arte para ver cómo podíamos hacer que lo que yo quería expresar de verdad se viese a ojos de los oyentes. En definitiva, he aprendido eso: que cuanto más te rodees de gente que ama lo que hace y que cree en tu proyecto, al final salen cosas con más a gusto.

P: ¿Cuál dirías que es la canción de Kintsugi que más te costó sacar y cuál es la que más te salió del alma, sin filtro?

R: Pues mira, No Puedo Evitarlo me costó bastante escribirla. Si te fijas, el álbum es como parte del Kintsugi, porque según vas avanzando en las canciones hay una curación emocional. Como que al final del disco he aceptado muchas cosas, me he curado y me he perdonado a mí mismo. Entonces, la primera canción es No Puedo Evitarlo y era el momento en el que más roto estaba. Me costó sacar esas palabras e incluso decírmelas a mí mismo.


Luego, Lo Siento ha sido una de las canciones que me han salido súper natural y súper rápido, y que expresa muy bien lo que quería hacer. En general, el disco salió muy rápido, porque era una cosa en la que estábamos muy alineados. De hecho, en una semana encerrados en nuestra casa salieron todas las ideas.

Denom durante una entrevista para El Generacional | Fuente: Rodrigo Nombela Domínguez (@r.nombela21)

P: ¿Sientes que el rap en España ha perdido crudeza o ha evolucionado emocionalmente?

R: Creo que se puede reivindicar de sentimientos, de política y de muchas cosas. Lo que pasa es que hoy en día muchos hemos perdido la fe en la política. En mi caso, prefiero centrarme más en mi política personal y en mis vivencias.
Aunque desde fuera solo se vea sentimiento, dentro de esos sentimientos también se están reivindicando muchas cosas.

Lo que sí es cierto es que se ha abierto mucho más el abanico. Hoy escuchamos mucha música internacional y eso ha globalizado la escena.

Antes aquí se escuchaban cuatro grupos. Hoy, por suerte o por desgracia, escuchamos y mamamos muchas músicas distintas. Creo que eso es bonito, que al final no todo tenga que ser igual. Yo creo que el rap es un poco el mensaje y la forma de escribir lo que lo define. Para mi sigue manteniendo una esencia a pesar de que se pueda representar en muchas formas.

P: Precisamente, ¿qué opinas de que cada vez las etiquetas no sean tan cerradas?

R: Me parece perfecto. Al arte no hay que ponerle etiquetas, cuantas menos etiquetas le pongas al arte más libre va a ser. Mi experiencia personal es que la música que hago es como mi momento de ser más libre, es el momento que no entra nadie a formar parte de ello, sino yo contra mí mismo en un folio. Pienso que el arte es como tú lo quieras expresar, tiene que ser así, sin ponerle barreras, sin que haya nadie que le ponga logotipos o estereotipos, porque cuantas más etiquetas pongas a una cosa creo que lo limitas.

Gracias a que ha habido gente que se ha atrevido a hacer lo que le ha salido del alma, esa cultura o esa música ha cogido peso. En otros tipos de arte también pasa, como en la pintura. Un Picasso en esa época era alguien completamente transgresor y que no tenía nada que ver su estilo con el que se veía en la época. Por ello, qué gusto que haya habido gente que se haya saltado las normas.

P: ¿Qué artistas emergentes de España, crees que están trayendo proyectos reales y que no se están tampoco dejando de influenciar por esta música un poco más comercial?

R: Emergentes no son, pero te diría que Natos y Waor han hecho las cosas muy bien, Recycled también. Ahora bien, ¿qué es comercial y qué no? El que sea comercial o no depende de que el público lo compre o no. Por ejemplo, Jarfaiter, hoy en día, es música comercial y él como persona no lo es para nada. Sin embargo, ha conseguido llegar a tanto público que al final es música popular también.
Jarfaiter, dentro de eso, a mí me encanta y me parece una persona que manteniendo su esencia y manteniendo su movida ha conseguido cosas muy grandes, no entrando en comercial o no comercial.

Luego, abriendo un poco el abanico, pues te podría decir el Grind de Barcelona, Miranda de aquí de Madrid, o te podría decir Mvrk. Otro que me encantaría destacar es Shake Da Block, es un chavalito que a lo mejor todavía no lo conoce mucha gente, pero para mí está trayendo una movida super fresca y super fiel a lo que es la música de Estados Unidos.

P: ¿Y qué crees que le falta a los artistas españoles de la escena para romper más allá del país?

R: En España creo que le falta cojones a mucha gente, perdona por la expresión, pero creo que a mucha gente le da miedo el qué dirán. Yo vengo de una movida de rap cerrado, por ejemplo, en la que hace años si me hubieses dicho que me iba a atrever a hacer reggaetón, a lo mejor te diría que no. Pero pienso que al final tienes que hacer lo que te late en ese momento y hay mucha gente, que yo los conozco, que están escuchando música de fuera y luego, sin embargo, dicen, no, pero es que yo no puedo hacer esto, porque es que si no mi público…

Hay que dejar al público a un lado. Eso es lo que yo pienso, que a la audiencia hay que mimarla y quererla, pero no puedes formar parte del público en tu momento de creación. En este sentido, nunca habríamos tenido figuras como estas que hemos hablado antes, como un Camarón, un Michael Jackson o Madonna.

Denom durante una entrevista para El Generacional | Fuente: Rodrigo Nombela Domínguez (@r.nombela21)

P: ¿Tienes algún ritual raro antes de grabar o escribir?

R: La verdad es que lo amo tanto y lo he hecho de tantas formas distintas que no podría decirte un ritual. Creo que me nace, no sé si decirte que es automático. Sí que es verdad que, por ejemplo, para crear una canción, me voy poniendo como distintos ritmos, me voy probando y voy como encendiendo un poco esa llama. Llega un momento que entro como en una especie de trance, que ya sale solo. Si tuviera que decirte un ritual creo que es ese.

De repente voy en automático y lo he notado mucho ahora, por ejemplo, estoy en un camp en Japón, que eran como muchas sesiones seguidas con artistas de distintos países y tal, y el segundo día escribía como mucho más rápido y mucho más fresco que el día anterior, porque necesitas poner a mover la máquina. Pero realmente he escrito canciones en cartones de leche y de galletas, de no tener ningún folio ni nada para escribir en el momento y de romperlo y escribirlo ahí al momento.

He escrito canciones en el móvil, en libretas de hotel, por la calle, en mi casa, en estudios… O sea, realmente en ese sentido no tengo una forma concreta de ritual, escribo donde puedo y cuando sale.

P: ¿Cómo gestionas la vulnerabilidad cuándo sabes que miles de personas van a escuchar lo que te duele?

R: Como te he dicho, intento en ese espacio, tanto cuando pinto como cuando escribo, evadirme de todo eso. Procuro no pensar a quién le va a llegar o a quién le va a dejar de llegar, intento no pensar a quién le pueda gustar o a quién le pueda ofender. Del mismo modo, pretendo no pensar a quién le van a llegar mis emociones, ni quién se va a ver representado o quién no.

Es un poco lo que te he dicho antes también, creo que lo que hay que tener es el valor de hacer las cosas. Al final eres tú contra ti mismo en ese momento.

P: ¿Y qué te inspira más: una conversación con tu madre o un familiar cercano o estar en un estudio con tus colegas?

R: La influencia de la familia en mi música ha sido fundamental, aunque mi camino ha sido muy personal y, en muchos momentos, solitario. No porque no contara con el apoyo de los míos, sino porque elegí encerrarme en el tipo de vida que llevaba. También hubo etapas en las que preferí no involucrarlos, para no exponerlos a ciertas situaciones.
Aun así, la familia siempre ha sido un pilar clave en mi proceso creativo.

Muchas de las conversaciones que no fui capaz de tener directamente con ellos, terminaron plasmadas en una hoja en blanco. La música me permitió, de alguna manera, expresar lo que no podía decir en voz alta. Y, con el tiempo, eso incluso abrió la puerta a hablarlo en persona.

Por otro lado, también he encontrado inspiración en amigos y en sus vivencias. Escuchar sus historias me ha llevado a escribir canciones que nacen de su experiencia, no solo de la mía. Así que, en realidad, tanto mi familia como mis amistades han sido fuentes importantes a la hora de componer.

P: Si mañana pudieras dejarlo todo y desaparecer sin ningún contexto y sin que nadie te pudiese juzgar, ¿a dónde te irías y qué harías?

R: Creo que ahora mismo puedo desaparecer en el momento que quiera. Soy una persona muy libre, me anclo muy poco al qué dirán o que me puedan juzgar o no.
El día que me apetezca desaparecer de la industria, desapareceré. ¿Dónde me iría? Pues igual a mi entorno de siempre, al de toda la vida. Tampoco necesito como irme muy lejos, porque al final las movidas de uno van con uno, estés en China o estés en las Galápagos.

No sé, uno de los sitios donde sí que me gustaría hacer un poco de suelo es en Japón. Allí me gustaría acabar teniendo un sitio donde poder escaparme. En Colombia también. Y luego pues una casita en el campo, mi pueblo de toda la vida y con gente que aprecio y que me quiere.

P: ¿Cuál es una idea, musicalmente hablando, que todavía no te has atrevido a explorar, pero que algún día te gustaría hacer?

R: Quizás hace más tiempo de ello, pero me llama la atención no sé si un grupo o a lo mejor solo, pero algo que no se asocie tanto a mi persona. Es decir, típico personaje que te lo creas y no sacas ni una sola imagen de quién eres. A lo mejor con algún efecto de voz distorsionada y que no se sepa que soy yo. Como para ver cuánto tiene que ver el personaje. Tal vez para hacer una movida completamente distinta o incluso cosas que coincidan, pero ver cómo habría sido si lo hubiese hecho de otra forma.

P: ¿Te hubieses atrevido a hacer algo parecido a Space Hammu en su día? Gente solo de Madrid y crearos un grupo entre todos.

R: Sí, eso me encantaría. De hecho, muchas veces lo hemos pensado. De hacerlo no solo yo, sino con otros artistas de la escena. Algún día, a lo mejor, se da.

P: ¿Se pueden saber los nombres con los que has hablado de esa idea?

R: Me encantaría como volver un poco a los orígenes también de toda esa movida y que se pudiese llevar a cabo un Gaddafi Click 2.0. De hecho, en su día fue un poco eso si lo piensas. Lo que pasa que en ese momento la industria no estaba como tan generada, por así decirlo.

Pero sí, algo así, como gente del entorno de la sierra. También contando con gente un poco más como Midas Alonso, con el Al Safir o con Natos y Waor. Es decir, con los que estábamos desde antes de que todo esto diera pan.

Denom durante una entrevista para El Generacional | Fuente: Rodrigo Nombela Domínguez (@r.nombela21)

P: ¿Cuál de todos estos artistas que has mencionado te ha sorprendido mucho como artista?

R: Como artista, a mí Recycled J, por ejemplo, es una persona a la que admiro mucho. Me ha sorprendido mucho, porque siempre ha ido un paso por delante de la escena.

Si es cierto que pienso que a lo mejor eso ha hecho que la gente no llegue a entender del todo su movida. Quizás han sido balones contra su propio tejado cuando realmente estaba generando el camino de toda esta nueva generación que está llegando. Pero para mí es una persona a la que respeto un montón, porque siempre ha hecho lo que le ha apetecido en el momento.

Luego, sin duda, Natos me parece un referente que me ha enseñado muchísimo en este camino. Él es muy cabezón y un gran profesional. Todo lo lleva al siguiente nivel, en cuanto a organización y a ser fiel a lo que ha pensado desde un momento. Jarfaiter también me ha sorprendido mucho siempre, su forma de adaptarse a los tiempos de hoy en día. Cuando nos conocimos no quería formar nada de parte en la industria y ahora ha sabido cómo llevarla a su terreno.

Son personas que, por suerte, son amigos. No son solo compañeros de industria y hay pocas cosas que me puedan hacer tan feliz como que mis referentes o la gente de la que me gusta aprender sean encima amigos míos.

P: ¿Qué le podrías decir al Denom de 17 años si te lo cruzaras en el metro mañana?

R: Que se rompa las 30.000 veces que nos hemos roto y que viva las cosas como las vive. Muchas veces he sido yo mi propio enemigo. El miedo, la fobia social, el estar siempre un poco como fuera de la sociedad quizás muchas veces me ha frenado en cosas. En ese sentido le diría lo que te he dicho antes, echarle más valor a ciertas cosas. Pero realmente que viva los pasos que hemos vivido que al final han servido de algo.

P: Has hablado de Grimey ¿Cómo ves ese papel que tienen quizás los sellos discográficos en una era tan digitalizada?

R: ¿Sabes qué pasa? Que Grimey no era un sello como tal. O sea, sí que pienso que han tenido un papel importante, en el sentido de que han sabido cómo organizar un poco lo que ha sido mi carrera. En el inicio, sobre todo, porque fueron los que me enseñaron cómo se hacía para que una canción que tuya, de repente, estuviese en Spotify.

También han sido los que me han metido un poco de presión a la hora de que hay que tener más constancia. Si grabas 50 temas al mes, intenta sacar cosas un poco más seguidas. Si consigues hacer un concepto, saca discos, preséntalo, haz tu gira. Pues pienso que tienen mucho valor en la industria de hoy en día, porque es verdad que quizás Grimey no actúa tanto como un sello, pero han formado parte en la historia.

Son los que enseñan al artista a eso, a cómo bregar con la industria, cómo hacer para que tu música esté en ciertos lados, para que tu música llegue a otro público para abrir esas puertas. Desde aquí, un sarao para toda la gente que tiene un sello y lo hacen por amor.

Actualidad y Noticias

+ Noticias de tu interés

Fito & Fitipaldis publica “El Monte de los Aullidos” tras cuatro años desde su último disco

El esperado regreso de Fito Cabrales llega con nuevo álbum y gira en 2025 que promete mezclar lo más novedoso con sus mejores éxitos Tras cuatro años desde Cada vez cadáver, Fito & Fitipaldis regresan con su octavo disco, El...

Doya inicia una nueva era con ‘Mariposa’, su canto alegre a la muerte

´Mariposa’ es la primera muestra de Luna bohemia, donde Doya mezcla sonidos latinos, electrónicos y flamencos Doya, el dúo musical detrás del que están las hermanas Melissa y Marina, regresan con el estreno de ‘Mariposa’, disponible en todas las plataformas...

Luck Ra hace historia: su team gana La Voz Argentina 2025 con Nicolás Behringer como campeón

La Voz Argentina 2025 cerró una edición histórica con Luck Ra y Nicolás conquistando al público y reafirmando el poder de la música En su primer año como coach de La Voz Argentina, el cantante cordobés Luck Ra hizo historia...

Descubre más desde El Generacional

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo